La industria del automóvil, por mucho que el boom de los coches autónomos y eléctricos vengan como salvadores de la industria, la realidad es que esta se está preparando una un cambio disruptivo en la forma en la que los usuarios acceden a los coches. En las grandes ciudades de forma incipiente, los modelos de pay-per-use como Car2go, en los que el usuario elige un coche disponible en la vía pública, están entrando con fuerza, y el renting particular también está adquiriendo cierta fuerza.
Encuestas demográficas indican que los jóvenes no incluyen el coche en propiedad como una de sus prioridades, y los coches autónomos están a poco de hacer tambalear el sistema una vez que empiecen a asentarse y la regulación comience a verlos con otros ojos. Por ello, muchos fabricantes están viendo en el modelo por suscripción como un bote salvavidas para mantener el modelo mismo de uso/propiedad, y desde luego puede ser una forma muy interesante para estandarizar un sistema de cara a la masificación del coche autónomo que no está en propiedad.
Lógicamente no estamos hablando un cambio a corto plazo, sino a una vista generacional para la cual los fabricantes deberán plantar la semilla necesaria para que el cambio de paradigma se produzca de forma controlada: coche particular bajo modelo de suscripción (una variación del renting) para posteriormente generar un derecho de suscripción o pago por uso para el coche autónomo. Algunos expertos consideran que este es el camino a seguir, y la industria ha empezado a ver con otros ojos el modelo de suscripción.
En este contexto, y según Automotive, la mayoría de los players importantes del mercado quieren entrar de lleno en el modelos de suscripción para plantar la base de un nuevo modelo de negocio: ofrecer a los clientes un vehículo por una tarifa mensual que incluye seguro, mantenimiento y recogida y entrega, un sistema parecido al renting pero con algunos beneficios adicionales como que se puede ir cambian entre los vehículos disponibles en función de las necesidades sin limitarse a períodos concretos.
De esta forma, Mercedes-Benz y BMW se están preparando para lanzar dos programas pilotos de suscripción de vehículos en los EE. UU. En 2018. En el caso de Mercedes, la compañía busca con este programa piloto determinar si el modelo de suscripción tiene un cabida a largo plazo, según confirmo Britta Seeger, directora de ventas globales de Mercedes-Benz, al medio especializado.
Así, BMW y Mercedes se unirían a otras marcas como Cadillac, Porsche, Volvo y Lincoln para probar los servicios de suscripción de vehículos e intentar comprobar si este modelo es la salvación a una industria que, innovación de la mano, está cambiando desde sus propios cimientos cada día.