El mercado de venta y distribución digital de videojuegos en PC está, en su práctica totalidad y rozando el monopolio, en manos de Valve y la gigantesca Steam. Cierto es que existen alternativas de cierta relevancia, como el enfoque más retro y abierto de Good Old Games o la primacía indie de itch.io pero, sobre el papel, el líder del mercado es evidente y es al que, al final del día, van todas las grandes y pequeñas empresas en busca de ventas.

Como intentar lanzar un refresco de cola que compitiera con Coca-Cola, que llegue el día en el que el trono de Steam se vea comprometido es harto improbable pero no será por interesantes alternativas. La última y más diferente propuesta, bautizada como Robot Cache, viene de la mano de Brian Fargo, uno de los veteranos de la industria que ha trabajado en títulos como Wasteland o Fallout, fundado inXile Entertainment e invertido y colaborado en Fig, una plataforma de crowdfunding. Ahora, su siguiente reto es crear una plataforma de venta de videojuegos descentralizada, que permita la reventa digital y que, importante, cuente con unos márgenes de beneficio mayores para los desarrolladores.

De esta forma tenemos, sobre el papel, una plataforma que daría más y mejores opciones a compañías y usuarios. Su apuesta por el blockchain y, por ende, su condición de negocio descentralizado reducirían costes y permitirían llevar los márgenes de beneficio por copia vendida hasta el 95% que, afirman, "cualquiera podría recibir, desde el estudio indie más humilde hasta la distribuidora más importante". Un aumento considerable con respeto al estándar del 70% que vemos en Steam o la App Store.

¿Pero cómo atraer al usuario hacia una nueva plataforma? La propuesta de Robot Cache en este sentido va dirigida hacia la posibilidad de reventa de los videojuegos y la existencia de IRON, una criptomoneda propia que, como cualquier otra, podrá ser minada con el objetivo de adquirir nuevos títulos.

Esa es una de las claves: todas las transacciones de Robot Cache tendrán como protagonista su propia moneda, el citado IRON, y eso permitirá la existencia de la también comentada compra-venta de artículos digitales "usados". Asimismo, el precio de reventa de los videojuegos será único en cada caso y fijado por la compañía desarrolladora o a la editora; el vendedor particular del juego se llevaría un 25% de dicho precio y la compañía creadora ingresaría un 70%.

Robot Cache sigue en desarrollo y llegará el segundo trimestre de este 2018, tal y como anuncian en la web oficial de la plataforma. Cuentan con una propuesta interesante que gira en conceptos nada comunes en la industria del videojuego y la empresa parece tener una filosofía muy clara. ¿Será posible competir con Steam?

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: