Los problemas para Samsung en lo que se refiere al caso del que hasta hace unos meses era su heredero, Jay Y. Lee, parece no tener un fin próximo. Después de que el pasado mes agosto se le condenara a 5 años de cárcel y el posterior recurso por parte de su equipo, los fiscales vuelven a solicitar ahora que se revise la pena, pidiendo que la condena por soborno y malversación de fondos para Lee se eleve hasta los 12 años en prisión.
Vuelve a producirse un duro golpe, por tanto, para Samsung, la compañía más venerada y conocida a nivel mundial de Corea del Sur y, más concretamente, a la división Electronics, la más importante de la empresa y de la que Jay Y. Lee era vicepresidente. No solo eso, sino que Lee es, además, el hijo del empresario que dirige Samsung Group –el conglomerado de empresas y subsidiarias que conforman el potente músculo industrial que abarca diversas áreas– y habría estado ejerciendo durante los meses previos a su condena como líder de facto en vista a dar el relevo a su padre.
La solicitud interpuesta ahora se ha realizado por medio del Tribunal Superior de Seúl, el cual se espera que ofrezca una respuesta en algún momento durante el próximo mes de enero, la cual aún admitirá un último recurso ante el Tribunal Supremo. Veremos la situación, por tanto, prolongada todavía durante unos meses hasta que se decida cuál será la pena que finalmente tendrá que acatar el que un día fue uno de los hombres con un mejor porvenir de su país.
Jay Y. Lee, vicepresidente de Samsung, condenado a 5 años de prisión
Una situación que ha de ser atajada
Sea cual sea el fallo final, lo que parece poco probable es que Lee pueda volver a tomar las riendas de Samsung algún día, por lo que desde la empresa ya se plantean el futuro sin él. La opción más solida en este momento sobre la mesa supondría que Lee Boo-jin, hermanada de Jay Y. ocupase el puesto de la presidencia del grupo, una medida que sería insólito por su condición de mujer en una empresa como Samsung, donde los altos mandatarios siempre han sido varones. Los fiscales, por su parte, son conscientes del actual estado de desequilibrio en el que se encuentra la empresa debido a la acusación.
La defensa dice que les preocupa el futuro de Samsung Group. Sin embargo, lo que realmente les preocupa es la pérdida de control de Lee y las consiguientes pérdidas económicas.
Tendremos que esperar aún para ver cómo termina finalmente un caso que, dadas las circunstancias, imaginamos que desde Samsung querrán dejar atrás lo más rápido posible. El "Príncipe heredero", como se conoce a Lee en los medios surcoreanos, quizá nunca llegue a hacer honor a su sobrenombre.