DC Entertainment y Warner Bros. se jugaban mucho el pasado fin de semana. Con la Liga de la Justicia (no te pierdas nuestra crítica) no solo llegaba la película más importante del DCEU (DC Extended Universe) hasta la fecha, por la unión de los grandes héroes de la marca en un solo film, si no el proyecto en el que compañía y productora ponían todas sus esperanzas de cara a unir los datos de taquilla y la opinión de la crítica, tan dispares hasta el momento.
Ahora, tras el primer fin de semana de la película, podemos hablar de un sorprendente fracaso. A falta de información sobre la recaudación global y centrándonos en Estados Unidos, principal mercado y vara de medir para este tipo de producciones, Liga de la Justicia ha recaudado unos poco impresionantes 96 millones de dólares.
Una cifra que supondría el éxito para el grueso de películas que se estrenan cada año se convierte, en este caso, en la peor recaudación durante el fin de semana de estreno de las cinco películas estrenadas hasta ahora en el universo cinematográfico de DC: Man of Steel recaudó 116, Batman v. Superman triunfó con sus 166, Suicide Squad alcanzó los 133,5 y Wonder Woman los 103.
Para más inri, supone el segundo peor estreno doméstico para una película protagonizada por héroes de DC, solo por detrás del estrepitoso fracaso del film de Linterna Verde, con 53.2 millones de dólares en su fin de semana inicial, en 2011. Todo ello sorprende más si cabe al tener en cuenta la progresión del estudio, tremendamente irregular a nivel cualitativo con sus tres primeros proyectos (Superman: El hombre de acero, Batman v. Superman y Suicide Squad) pero que terminó dando en el clavo durante el pasado verano con la llegada de Wonder Woman a la gran pantalla. La película de Patty Jenkins se ganó, por primera vez en el DCEU, el apoyo de la crítica y el público, convirtiéndose en un arrollador e inesperado éxito.
Asimismo, otro de los agravantes de los resultados obtenidos son el costo y los problemas en la producción de la película. Con Zack Snyder a la cabeza, director plenipotenciario del renovado DCEU, los primeros pases privados de La Liga de la Justicia dejaron clara la necesidad de un periodo de regrabaciones con el que aligerar el tono, añadir más humor (influidos, principalmente, por el arrollador éxito del "estilo Marvel") y lograr una mejor cohesión de todas las partes.
Para tal fin, tras el abandono del proyecto de Snyder a causa de una tragedia familiar, se apostó por el trabajo de Joss Whedon, encargado de llevar a la pantalla las dos primeras películas de Los Vengadores.
Todo ello hizo aumentar la inversión y llevó el presupuesto final de la película a unos desorbitados 300 millones de dólares. A fin de contrastar, el film de Los Vengadores estrenado en 2012 recaudó la friolera de 207 millones de dólares en su primer fin de semana en USA, con un presupuesto de 220 millones.
La diferencia es arrolladora. Con todo, Liga de la Justicia es, a estas alturas, el segundo peor estreno de temática superheroica del 2017, solo por detrás de una Logan, que, eso sí, recibió el favor de la crítica y llegó a las pantallas con un presupuesto más comedido, unos 150 millones de dólares que recuperó en apenas cinco días.
Queda un largo camino por delante pero Jeff Goldstein, presidente de la distribución doméstica de Warner Bros., ya ha declarado que "el camino hacia el éxito en taquilla es diferente al que habían pensado".
Las previsiones, teniendo en cuenta las fechas de Acción de Gracias, apuntan a que Liga de la Justicia rondará los 700 millones de dólares al acabar su recorrido en cines. Sería, sin asomo de dudas, un descalabro dentro de las previsiones del DCEU y, a buen seguro, un claro condicionante del futuro cinematográfico de la franquicia.