Máxima alerta en la isla de Bali (Indonesia). Las autoridades han ordenado la evacuación de más de 100.000 personas ante la "erupción inminente" de Agung. La reciente actividad del volcán, que ha arrojado humo y cenizas a más de 6.000 metros de altura durante las últimas horas, también ha obligado a cerrar el aeropuerto internacional de Lombok.
"Pedimos a la gente en la zona de peligro que evacue inmediatamente porque existe el riesgo de una erupción mayor", ha señalado Sutopo, portavoz de la Agencia de Mitigación de Desastres de Indonesia (BNPB). El Gobierno ha decretado el desalojo de los residentes que vivían en un radio de hasta diez kilómetros desde el volcán Agung, tras confirmar las cenizas, las llamas y débiles explosiones que se han notado durante las últimas horas y que hacen temer el peor de los escenarios posibles.
¿Qué caracteriza al volcán Agung?
Situado a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, el volcán Agung es la montaña más alta de Bali. Al igual que otros montes como el Teide (España), el Vesubio y el Etna (Italia) o el Popocatépetl (México), Agung se trata de un estratovolcán. Este tipo de volcanes se generan a partir de múltiples erupciones, según explican desde la Universidad Complutense de Madrid, en las que los productos y materiales se van superponiendo dando forma al típico edificio cónico de estas estructuras.
El volcán Agung forma parte del Arco de Sunda, una hilera de más de 3.000 kilómetros de volcanes situada en Sumatra, Java y otras islas menores de Indonesia, como explican desde la Universidad del Estado de Oregón. Algunas de estas estructuras han sido clasificadas entre los volcanes más peligrosos del mundo, como el famoso Krakatoa. En general, el sudeste asiático es una de las regiones volcánicas más activas del mundo, al estar localizada en el llamado Cinturón o Anillo de Fuego del Pacífico.
¿Ha entrado más veces en erupción?
La última vez que el Agung entró en erupción fue en 1963, un evento que llegó precedido de varios terremotos durante los días anteriores y que comenzó con un río de lava que alcanzó los 7,5 kilómetros de distancia durante los primeros veintiséis días. Las dos explosiones que tuvieron lugar, según recuerda el Observatorio de la Tierra de Singapur, estuvieron acompañadas de columnas de humo y cenizas de 20 kilómetros de altura, que se expandieron hasta llegar a Jakarta, a más de mil kilómetros de distancia, además de flujos piroclásticos y lahares (un término que hace referencia a los flujos de sedimentos y agua).
La erupción del Agung de 1963 es considerada como la más grande y devastadora en la historia del siglo XX, ya que causó más de 1.100 víctimas mortales, de acuerdo con un trabajo publicado en la revista Bulletin of Volcanology. De forma anterior a este evento explosivo, Agung había permanecido en estado durmiente durante casi 120 años, ya que su anterior erupción fue registrada en 1843, aunque se conserva poca información sobre lo sucedido.
¿A qué se debe su actividad?
El volcán Agung es fruto de la intensa actividad geológica en la región donde se localiza. Bali se sitúa en el conocido Cinturón del Fuego, una zona que rodea el océano Pacífico y que es conocida por sus terremotos y volcanes. Según el Observatorio de la Tierra de Singapur, las islas de Java, Sumbawa, Lombok y Bali se encuentran en una región caracterizada por el movimiento de subducción entre dos grandes placas tectónicas.
La litosfera terrestre se divide en diferentes fragmentos, denominados placas tectónicas, que flotan sobre el manto, como si fueran unas galletas encima de unas natillas de postre. En función del tipo de desplazamiento de las placas, los investigadores hablan de límites convergentes, si las porciones se acercan entre sí; divergentes, si se separan; o de límites transformantes si se producen movimientos en paralelo. En el caso de Bali, se da un desplazamiento de aproximación entre la placa Indoaustraliana y la placa Euroasiática: la primera se introduce por debajo de la segunda en un movimiento llamado subducción.
Los bordes afectados por un proceso de subducción, según explican desde la Universidad de Castilla-La Mancha, son destructivos, ya que en ellos se produce la fusión de la corteza terrestre. Según el Observatorio de la Tierra de Singapur, cuando la placa Indoaustraliana alcanza una profundidad superior a los cien kilómetros, la corteza oceánica hidratada funde a temperatura baja dando lugar a la formación del magma. Este material, más caliente y menos denso que los productos de su alrededor, migra hacia la superficie, donde provoca la actividad volcánica típica de este tipo de límites de placas tectónicas, caracterizados también por una gran sismicidad, como demostró el terremoto del Índico de 2004 que dio lugar a varios tsunamis.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos, los estratovolcanes como el Agung generan una lava mucho más viscosa y múltiples escombros piroclásticos explosivos. La actividad en aumento de este famoso volcán de Bali, sin embargo, se conoce desde hace varias semanas, ya que durante el pasado mes de septiembre las autoridades alertaron de una mayor actividad sísmica en la región, además de confirmarse cambios en la superficie, anomalías termales y producción inusual de gases, según informó National Geographic. Los especialistas han señalado ahora que si la erupción finalmente ocurre, tal y como se teme, la lluvia de cenizas y los ríos de lava puedan ocasionar numerosos daños materiales y personales, de ahí las recomendaciones de evacuar a la población para evitar que haya víctimas.