Cuando Google anunció que lanzaría un dispositivo para el hogar, no fueron pocos los reticentes ante la promesa de tener en sus casas un altavoz con micrófono de una de las mayores empresas del mundo que utiliza los datos como moneda de cambio. Sin embargo, Google Home llegó y desde entonces ha estado presente en muchos hogares para hacer que la vida cotidiana sea más fácil en algunos aspectos.
Hace unos días vimos a la gigante tecnológica presentar nuevas incorporaciones la familia Home: el Home Max y el Home Mini. Este último ya se puede comprar en determinados países, lo cual ha provocado que, naturalmente, ya haya unidades localizadas a lo largo y ancho de estos. El lanzamiento, no obstante, se ve empañado ahora por una flagrante violación de la privacidad de los usuarios al descubrirse que el dispositivo habría estado grabando de manera constante y sin consentimiento todo lo que ha ocurrido a su alrededor durante estos primeros días.
La respuesta a todo esto no se encuentra en que Google quiera conocer todo cuanto pasa a nuestro alrededor -al menos, no haciendo uso de estos métodos–, sino en un bug mediante el cual el dispositivo experimentaba "toques fantasma" en la parte táctil del mismo, activando así la escucha. Estas grabaciones eran procesadas y enviadas a la empresa, estando disponibles para su posterior uso también a través de la aplicación del usuario. Así lo cuentan en AndroidPolice, publicación que se ha hecho eco de la noticia al descubrir este fallo uno de sus editores, tras lo cual se puso en contacto con la propia compañía.
Desde Google confirmaron este fin de semana que, efectivamente, el fallo existía, pero no fue hasta el día de ayer cuando le pusieron solución mediante una actualización de software. La cuestión que se plantea ahora es muy clara y continúa siendo la misma que cuando comenzaron a ponerse a la venta este tipo de altavoces inteligentes: ¿estamos comprometiendo en exceso nuestra privacidad?