¿Qué tienen en común un físico de la UNAM y un economista de la Universidad de Oxford? Que a ambos los puedes encontrar en Tinder. Ingenieros, mercadólogos y comunicólogos son tan solo algunos de los profesionistas, tanto hombres como mujeres, que recurren a la app para conseguir una cita.
"A nivel global, el 85% de los usuarios de Tinder tienen entre 18 y 34 años de edad, y más del 50% tienen entre 18 y 24 años", de acuerdo con datos proporcionados vía correo electrónico por Tinder a Hipertextual. Este rango de edades abarca a la denominada generación millennial.
Otro factor importante es el nivel de educación, indicó Tinder, "lo que a menudo puede hacer más probable que un usuario sea, entre otras cosas, un joven con una carrera profesional ocupada que busca nuevas y diferentes maneras de hacer conexiones".
Al igual que ocurre en otros aspectos de la vida de los millennials, buscar una cita a través de una app como Tinder se ha vuelto la mejor opción para los jóvenes profesionistas cuyo estilo de vida no les facilita conocer a parejas potenciales en situaciones cotidianas, como cuando eran estudiantes y estaban más expuestos a convivir con gente de su edad.
Uno de los motivos por los cuales los profesionistas recurren a Tinder es la limitación de su horario para conocer gente nueva. "No tengo tiempo de salir mucho, y cuando lo hago, frecuento a la misma gente que ya conozco y es difícil conocer a alguien así, y creo que por Tinder es fácil y vas al grano", dijo Farah, de 24 años, en entrevista a Hipertextual.
Este es un nuevo fenómeno social. "Los espacios de socialización están cambiando. Ante la falta de tiempo de los profesionistas, los espacios de interacción se reducen, más no el interés por socializar. Así que las nuevas aplicaciones dan una alternativa de interacción", explicó Fernanda Ortega Morfin, psicóloga y académica de la Universidad de Guadalajara, en entrevista a Hipertextual.
Además, Tinder no es solamente utilizado con el fin de conseguir una cita para una sola noche, pues los usuarios también están abiertos a la posibilidad de hallar una relación formal. "Lo uso con la finalidad de encontrar a alguien con quien divertirme por un rato, pero no me niego a encontrar a alguien formal por ahí. Sé que es muy probable que solo salen hombres para una noche, pero yo he sacado dos hombres muy cool de ahí", señaló la joven cineasta.
"Lo que antes era complicado de otorgar a otros que era la confianza, ahora es muy fácil y son nuestros 'amigos' completos extraños que resultan ser afines o que por lo menos eso han elegido difundir en sus redes sociales. Las relaciones también ya no son para siempre. Eso hace más fácil que no pretendamos encontrar a alguien para toda la vida, sino alguien que en este momento nos resulte afín o interesante", añadió la psicóloga.
Por su parte, Gustavo, de 28 años y quien es comunicólogo, explicó en entrevista a Hipertextual que si bien empezó a usar Tinder como una forma de entretenimiento cuando volvía a su casa por las noches porque le gusta la adrenalina que le genera el proceso de hacer match, tampoco está cerrado a la posibilidad de encontrar una relación formal. Para él, depende del resultado de la primera cita. También señala la cuestión de los horarios, pues el fin de semana muchas veces tiene que hacer lo que no hizo entre semana, como lavar su ropa.
"Si llegas a tu casa a las 11 después de que trabajaste hasta esa hora, que estás cansado y necesitas descomprimirte, pues tampoco es como que en martes te vas a ir al bar a ver qué ligas y, segundo, pues a mí creo que, sobre todo aquí en la Ciudad de México, creo que toda esa onda de que te le acercas a la niña en el súper y se da como que 'ay, los dos nos estiramos y agarramos la misma avena', pues no funciona tanto porque hay mucha desconfianza. Y curiosamente, el Tinder te permite generar esa confianza", dijo el joven comunicólogo, y añadió:
Los medios tradicionales de conocer a una persona como antes se han roto un poco por la desconfianza que hay en la Ciudad de México.