Era de esperar, tras la presión del Gobierno británico y las consecuentes declaraciones de algunos de sus miembros, que ven en el cifrado de comunicaciones una amenaza cada vez mayor, paradójicamente, para la seguridad. Y es que la Comisión Europea tiene prevista la proposición, este junio, de una serie de medidas para garantizar, o al menos intentar garantizar, que la policía y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado puedan acceder a los datos cifrados de aplicaciones como WhatsApp.
Vera Jourova, la comisionada de justicia de la UE quiere consultar con los diferentes ministros de interior nacionales. En Este sentido, la idea es anunciar tres o cuatro medidas, incluyendo una nueva legislación para la Unión Europea y varios acuerdos voluntarios con las empresas del sector para que pongan en marcha solucionas que permitan a las autoridades policiales solicitar información relativa a comunicaciones cifradas de una forma rápida y fiable.
De esta forma, lo que busca la UE no es atacar directamente al cifrado, sino que las compañías entreguen información relativa en casos puntuales. El problema es que, en muchos servicios como WhatsApp, es imposible acceder por parte de la compañía a las comunicaciones entre sus usuarios debido a la tecnología de cifrado y a que WhatsApp no almacena el contenido, pues está alojado en los terminales de los usuarios.
“Las autoridades como los fiscales, los jueces, también la policía y las fuerzas del orden, dependen de si los proveedores proporcionarán voluntariamente el acceso a la evidencia. Esta no es la manera en que podemos facilitar y garantizar la seguridad de los europeos, que depende de alguna acción voluntaria “ - Vera Jourova.
De momento habrá que esperar a junio para comprobar cómo de voluntarias son las peticiones de la Comisión, pero desde luego, el hecho de que se quiera poner en tela de juicio el cifrado a favor de una supuesta mayor seguridad es una mala noticia para todos.