Tal como estaba previsto y venían apuntando los rumores, Nokia ha hecho oficial su vuelta a los smartphones clásicos con una suerte de revisión del mítico Nokia 3310, esta vez, de la mano del nuevo propietario de Nokia y fabricante chino HDM Global. De esta forma, el Nokia 3310, uno de los móviles más robustos y conocidos del pasado glorioso del anterior fabricante finlandés, vuelve de nuevo al mercado para intentar recuperar un poco de esa gloria perdida y situar a HDM Global en el centro de la opinión pública, algo que ni sus terminales Nokia con Android, ni su tablet, ni su cámara OZO supieron hacer.
En forma de remake, más homenaje que vanguardia, el nuevo Nokia 3310 que acaba de ser presentado por HDM Global en el seno del Mobile World Congress 2017, aunque como todos esperábamos, lo hace fuera del esplendor que Nokia tuvo en algún momento del pasado, puesto que por lo que promete, sobre el papel, el nuevo Nokia 3310 es más una forma de hacer ruido que de competir de tú a tú con el resto de modelos del mercado fuera de la gama media-baja; puesto que lo que era vanguardia en el pasado, su forma de hacer las cosas, dista mucho de lo que el consumidor medio busca en estos tiempos.
Sea como sea, el nuevo Nokia 3310 nos ofrece un terminal de gama baja con teclado clásico con pantalla de 2,4 pulgadas QVGA, cámara de 2 megapíxeles, e incluso una ranura microSD, pero con funciones muy limitadas para un mercado que, desde luego, no es el objetivo de resto de terminales de la compañía. Y es que a diferencia de la robustez del modelo clásico, la variante moderna es un poco más pequeño, más delgado, más ligero, muy parecido a cualquier terminal de gama baja genérico.
Como vemos en la imagen que ilustra estas líneas, el terminal no es más que cualquier genérico de la compañía con el nombre del clásico Nokia 3310, pero desde luego dista mucho de ser lo que el público general esperaba, por mucho que estuviésemos hablando de la gama baja.
El nuevo Nokia 3310 llegará al mercado por poco más de 49 euros/50 dólares a lo largo del segundo trimestre, prometiendo una batería de 25 días en espera, navegación básica a internet con Opera mini y un tiempo de conversación de 22 horas.