Estas de nuevo en tu última aventura turística, ya sea esa ciudad cosmopolita o la vuelta de la esquina —dependiendo del tipo de persona que seas— verás siempre las mismas cosas. Recomendaciones en artículos te llevarán al hermoso museo que todo el mundo ha visto, la plaza histórica de los cuadros o la escultura que todos conocen únicamente por las fotos junto a ella. Sin duda es hermoso, pero no tienes ni idea del mundo subterráneo que te estás perdiendo, y como en la vuelta de la esquina, existe una gigantesca alcantarilla sin explorar.
Aunque claro, nadie quiere llenarse de los hermosos residuos humanos que corren a través de ella, por lo que nos limitaremos a lo inexplorado. Cada ciudad es característica por sus monumentos, mas primero que todo por sus dichosos ciudadanos, y cuando no te aconsejo que vayas cuadra por cuadra observando la cara de todo el que pasa —porque lastimosamente te puede poner demasiado fácil en una cárcel extranjera—, te pido que visites los locales que ningún turista se atrevería a pisar.
Lo probé una vez en Aruba, uno de los únicos destinos extranjeros que he podido visitar, pasando detrás de las tiendas caras y examinando celulares a mitad de precio. Aunque no compré nada por miedo a que fueran robados, tuve la experiencia de conocer a los Yakuzas en persona cuando una docena de asiáticos en traje terminaron de hablar con la cajera. Ahora imagínate la misma escena en un lugar tan pintoresco como la ciudad del amor, París.
El fotógrafo Sebastian Erras probó esta técnica realizando un trabajo fotográfico para Pixartprinting, ahora nos trae la última edición mostrándonos la cara oculta en las tiendas más exóticas de la capital francesa. Veamos si sus fotografías pintorescas te muestran el lugar como nunca antes lo habías visto.