2016 ha tenido sus más y sus menos en lo que a inversiones en startups se refiere; unos opinan que no ha sido para tanto y otros que ha sido un año de logros. La realidad es que, en términos generales, la estructura se ha mantenido bastante pareja a lo que pudo dejarnos un sorprendente 2015. Lo que no podemos negar es que en el pasado año, la biotecnología ha sido un sector que ha acaparado las miradas y los fondos tanto de inversores extranjeras como españolas en empresas nacionales: según TTR en su informe anual, han sido 22 las biotecnológicas que han recibido fondos por parte de firmas de venture.
Ahora, una de las primeras rondas importantes del año viene directamente del sector bio. SOM Biotech, con sede en Barcelona, acaba de levantar una importante ronda de financiación de un grupo de business angels, mayoritariamente exdirectivos de compañías farmacéuticas. 2 millones de euros con los que seguir con sus procesos de investigación para incrementar su nivel de patentes a lo largo de 2017, aumentar su presencia en Estados Unidos y entrar en ensayo clínico con su medicamento contra la enfermedad de Huntington.
Lo interesante de esta compañía es que es una de las pocas a nivel mundial capacitada para identificar procesos de reposicionamiento de medicamentos. O lo que es lo mismo: fármacos ya a la venta que puedan emplearse para otras patologías distintas a las que se especificaban en primera instancia. El resultado es un descenso de los costes y una considerable reducción de los tiempos de estudio al no tener que esperar a todas las fases de estudio clínico.
Para SOM Biotech no es la primera experiencia con inversores, puesto que la compañía ha levantado más de 5,3 millones de euros de diferentes inversores. Y, según sus fundadores, el objetivo es aumentar otros 10 millones con una próxima Serie A.
De seguir este ritmo, lo más seguro es que las 22 operaciones de financiación a compañías biotecnológicas se superen a lo largo de 2017 y con más importe medio.