SPOILER ALERT! No sigas leyendo si no has visto el glorioso capítulo "San Junipero" de Black Mirror.
El estreno de la tercera temporada de Black Mirror ha dado mucho de qué hablar; muchas opiniones no van en la misma dirección pero algo es seguro: el episodio "San Junipero" (3x04) no ha pasado desapercibido. Esto es porque, probablemente, es uno de los mejores de la serie. Varios son los motivos que podemos mencionar, por un lado es un capítulo sui generis (incluso para la peculiar Black Mirror). Ningún otro episodio de la serie tiene un final feliz y este sí; sus protagonistas son dos chicas que se enamoran sin cortapisas, estos personajes son tratados con inteligencia y respeto, es decir, no están de adorno, no mueren a la primera de cambio (como muchos otros personajes LGBT que nos han sido arrebatados, ni son llevados por caminos trillados. Todo el capítulo es refrescante, memorable, muy profundo; una simple (y gloriosa) historia de amor.
Otro elemento que hace a "San Junipero" un maravilloso episodio es el tratamiento de la nostalgia. En casi todo el capítulo podemos ver los elementos más icónicos del año 1987: en cartelera se encuentra "The Lost Boys" de Joel Schumacher; en los escaparates podemos ver flamantes televisores a color en donde aparece Max Headroom y en la radio suena "Heaven Is A Place On Earth" de Belinda Carlisle. Estos elementos de la cultura pop enmarcaron ese año y Charlie Brooker sabía bien que echar mano de esa nostalgia sería el trasfondo ideal para su historia de amor.
En otra ocasión podemos ver un poco más atrás del año 1987, cuando Yorkie busca a Kelly en otras épocas. Así, visitamos el año 1980 en donde en la televisión presentan el fabuloso Chrysler Cordoba ("totalmente rediseñado"), de fondo tenemos al éxito de ese año "Funkytown" de Lipss Inc. y Davis, el personaje que siempre aparece jugando videojuegos, está entretenido con Pac Man, lo que él llama "la era de oro". Luego visitamos el año 1996 en donde en cartelera se encuentra "Scream", en la televisión están proyectando "Ironic" de Alanis Morriset.
Para 2002 vemos en cartelera a "The Bourne Identity" de Doug Liman, en la televisión proyectan "Get the Party Started" de P!nk. En los videojegos acapara la atención el famosísimo "Dance Dance Revolution 3rdMIX"... justo ahí encuentra Yorkie a Kelly con nuestro viejo amigo Davis, quien, por cierto, muy al inicio del episodio da una de las pistas más significativas de la historia cuando dice que el juego "tiene diferentes finales, depende de si estás jugando en modo de uno o dos jugadores". El mismo Charlie Brooke ha dicho que sí se trata de una pista.
El escritor y creador de Black Mirror ha dicho en entrevista que este episodio fue el primero que escribió de la tercera temporada y que estaba convencido de querer desafiarse a sí mismo; tal vez de esto procede que sea tan distinto a los demás, tanto de los predecesores como los siguientes que confeccionó. También en entrevista, Brooker ha dicho que originalmente los protagonistas eran heterosexuales pero, una vez más, se desafió a hacer cosas distintas. Lo cual es de agradecerse cuando creó dos personajes tan entrañables como Kelly y Yorkie.
Lejos de lo que se puede creer, San Junipero no está filmado en California. El paradisíaco (literalmente) lugar donde se desarrolla la profunda historia de Kelly y Yorkie no fue filmado en la famosísima costa californiana sino muy lejos de ahí: en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Muchas teorías se han elaborado sobre "San Junipero" y demás capítulos desde que se estrenó la tercera temporada en Netflix. Una de ellas tiene que ver precisamente con el final (parece que a todos nos cuesta aceptar un final feliz sin que pensemos que hay una trampa detrás). Se ha dicho que tal vez la Kelly que se queda con Yorkie es su propia Kelly, es decir, que la Kelly que vemos es algo así como un "fantasma" o una versión, un código hecho para que Yorkie tenga su propia versión del paraíso. Brooker mismo ha dicho que no es así, que es un simple final feliz, pero para los fans de la serie adictos a las teorías esto no ha sido suficiente.
Otro elemento que hace imprescindible este capítulo son las actrices que dan vida a las protagonistas: Gugu Mbatha-Raw (Kelly) y Mackenzie Davis (Yorkie). A esta última la conocemos bien de Halt and Catch Fire. Davis ha dicho que en primera instancia la invitaron a hacer el papel de Kelly pero ella insistió en hacer el papel de Yorkie (vaya buena elección). Por su parte, Mbatha-Raw ha dicho que desde que conoció el guion quedó profundamente conmovida. Y es que el argumento de este episodio es mucho más profundo de lo que parece. En realidad, casi todos los episodios de Black Mirror nos llevan a ese estado: a preguntarnos la naturaleza de los más bajos actos, que nada tienen que ver con la tecnología sino del uso que hacemos de ella.
Por último, y no menos importante, el buen Charlie Brooker compartió hace muy poco una preciosa playlist de Spotify de San Junipero, canciones que aparecieron en el episodio y otras, que por motivos de derechos, no pudieron aparecer pero que el creador de la serie habría puesto sin dudar.