Mientras el debate sobre el coche autónomo se mantiene en la mesa tras los accidentes de varios Tesla que utilizaban esta función, Uber ha anunciado que ya tiene lista su flota de coches autónomos para el servicio y que comenzará su despliegue gradual, comenzando en Pittsburgh en las próximas semanas, aunque el plan es dotar la ciudad con 100 vehículos autónomos antes de que termine el año.

El modelo elegido por la compañía llega de la mano de Volvo, que ha modificado su XC90 para integrar todo tipo de sensores y medidas de seguridad y convertir el coche en 100% autónomo, aunque el plan de Uber tiene algo de trampa. A pesar de que, efectivamente, los coches que pondrá en marcha este nuevo plan de la compañía son autónomos, estarán en todo momento supervisados por humanos en el asiento del conductor, para poder sortear parte de la regulación y a la vez supervisar que no haya accidentes de ningún tipo.

Los coches autónomos de Uber estarán supervisados por un conductorTodo forma parte de una carrera para adelantar a la propia Google y poner en el mercado propuestas reales más allá de las de Tesla. Y a diferencia de estas dos compañías, Uber no tiene intención de producir en masa sus propios coches, tal como han reportado a Bloomberg fuentes de la compañía: Uber va a llegar a acuerdos con los fabricantes de automóviles, como este con Volvo Cars, y desarrollará kits para otros modelos y fabricantes.

En esta primera fase de lanzamiento, los clientes seguirán solicitando coches de la manera habitual, pero los vehículos disponibles se combinaran al azar con los coches sin conductor. Además, los primeros usuarios que utilicen los vehículos autónomos de Uber no tendrán que abonar la tarifa.