A pocos días de que Brasil se convierta en el escenario mundial de los Juegos Olímpicos de Río 2016, miles de atletas de todo el mundo viajan hasta este país con el objetivo de representar a sus países lo mejor posible en cada una de sus disciplinas. La última campaña de Samsung, partner de estos JJ.OO., lo demuestra en un emotivo spot, The Anthem. Pero, qué nos has hecho llegar aquí, cuáles son algunos de los sucesos más sorprendentes que han mantenido vivo el espíritu olímpico todos estos años a pesar de las barreras y obstáculos.
Jesse Owens desafió a Hitler en Berlín
En los Juegos Olímpicos de 1936 celebrados en Berlín, Jesse Owen desafió a base de medallas de oro las teorías de un Hitler que quería demostrar en aquella cita mundial la supremacía de la raza aria, y quien se ausentaba en la entrega de medallas cuando no las ganaba un alemán. Este joven y desconocido atleta negro tan solo un par de años antes, consiguió una hazaña que no sería igualada hasta los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 en los que Carl Lewis ganó la misma cantidad en los mismos eventos.
Abebe Bikila, primera medalla de oro para África
No fue hasta 1960 en los Juegos Olímpicos de Roma que un atleta africano ganó una medalla de oro. Abebe Bikila, quien siempre conseguía sus victorias con heroísmo. En la prueba de ese año consiguió ganar, y lo hizo descalzo. Paso a formar parte del grupo de héroes nacionales, y puso un punto en el mapa de su país Etiopía, para que fuera visible en todo el mundo. Completó la carrera en 2:15:16", estableciendo una nueva plusmarca mundial. Una inspiración para posteriores generaciones de atletas africanos, como sabéis, potencia en este tipo de deportes desde hace generaciones.
La puntuación perfecta: 10
En los Juegos Olímpicos de Montreal 1976 sucedió algo impensable hasta aquel momento, ni siquiera los marcadores estaban preparados. Nadia Comaneci rompió todos los esquemas al convertirse en la reina de aquellos JJ.OO., y lo hizo con la puntuación perfecta siete veces. En sus ejercicios de asimétricas, algo nunca visto en la historia, ni siquiera los marcadores electrónicos pudieron proyectar su nota real. Estos sólo tenían un dígito para los números enteros y dos para los decimales, por lo que tuvieron que escribir un 1.00.
La unión para una nueva África
En los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, dentro del marco de la liberación de Sudáfrica del Apartheid, asistimos a la unión de nueva África. En la carrera de 10.000 metros, los atletas Derartu Tulu (atleta negra de origen etíope) y Elana Meyer (atleta blanca de origen sudafricano), obtuvieron el primer y segundo puesto respectivamente. Fue la primera vez que una atleta negra africana ganaba una medalla, y la imagen de ambas deportistas tomadas de la mano dando la vuelta olímpica, dio la vuelta al mundo.
Beijing 2008, los superhéroes existen
Tras décadas y décadas de competición, habíamos asistido a grandes proezas del ser humano en los que el esfuerzo y el sacrificio primaban por encima de todo. En los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 asistimos a dos acontecimientos increíbles. Por un lado el velocista jamaicano Usain Bolt rompía todos los paradigmas posibles con una actuación espectacular en la final de los 100 metros con una marca de 9.69". El dominio total de la competencia y su pasividad en los metros finales le han convertido hasta el día de hoy en el hombre de los récords, y el más rápido sobre la faz de la tierra.
Por otro lado, el nadador Michael Phelps, se convirtió en el deportista olímpico más condecorado de todos los tiempos, con un total de 22 medallas. En los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 tras ganar ocho medallas de oro, Phelps se consagró como el máximo medallista de oro en una sola edición de los juegos. Era, y sigue siendo todo un superhéroe bajo el agua.