Ilustración del tercer planeta orbitando TRAPPIST-1, con sus dos hermanos mucho más cerca.

Científicos de la Universidad de Lieja, el MIT y otros centros académicos han conseguido identificar 3 planetas orbitando una estrella enana marrón, conocida como TRAPPIST-1, con un 8% de la masa de nuestro Sol. Similar a nuestro Júpiter. Es el primer exoplaneta descubierto con el telescopio belga Trappist, en Chile.

TRAPPIST-1 además es muy vieja, y ya no tiene materia suficiente que fusionar, así que está casi apagada y fría. Eso no quita que no sea interesante. Los investigadores belgas han descubierto 3 exoplanetas de un tamaño “similar” a nuestra Tierra orbitándola.

Ilustración desde la atmósfera superior del segundo planeta.
Ilustración desde la atmósfera superior del segundo planeta.

Dos de los planetas orbital TRAPPIST-1 muy cerca, con órbitas de 1,5 días el primero, y de 2,4 días terrestres el segundo. A pesar de estar tan cerca, con lo fría que es la estrella, podrían estar en la zona de habitabilidad gracias a una temperatura ligeramente inferior a la de congelación del agua y una radiación recibida inferior a la máxima estimada. El tercer planeta estaría orbitando de forma más indefinida para las mediciones observadas, pero estaría en una órbita de hasta 70 días de duración, mucho más apartado de la estrella, recibiendo menos calor, pero también menos radiación.

El descubrimiento es importante porque este tipo de estrellas suponen más o menos el 15% del total de estrellas en nuestra galaxia, y nos ayudará a comprender cómo se forman planetas en sistemas tan pequeños.

Situada a “solo” 40 años luz de nosotros, TRAPPIST-1 y sus planetas son una de los lugares más prometedores por sus condiciones, para encontrar algún tipo de actividad biológica fuera del sistema solar. Descubrir que este tipo de estrellas también pueden albergar planetas en este rango, es muy importante pues hará mirar a los científicos más a fondo a estrellas de este cercanas de este tipo. Solo el tiempo dirá si el cambio es un cambio de paradigma en la búsqueda de vida extrasolar tan grande como afirman sus descubridores, pero de momento permanecemos optimistamente escépticos.