El proyecto de Red Compartida de México iba a ponerse en marcha, teóricamente, en 2014, como una reforma del sector de las telecomunicaciones con la finalidad de aumentar la calidad de la red, tanto en cobertura como en nivel de penetración para la señal de telefonía móvil, así como para amortiguar el avance de América Móvil, propiedad de Carlos Slim, que va camino de un dominio exagerado. Tras numerosos retrasos, ahora se ha producido uno más: no será hasta septiembre cuando vencerá el plazo para presentar propuestas y ofertas técnicas.
Inicialmente, cuando se dieron a conocer las condiciones de la licitación en enero, esa fecha era el 8 de agosto, pero recientemente se acordó traslada dicha fecha al 8 de septiembre, lo cual acabará repercutiendo en la fecha final de puesta en marcha del proyecto. El resultado de dicho concurso también se ha trasladado, y además más de 30 días, ya que pasa del 24 de agosto al 28 de septiembre.
La reforma de Red Compartida permitirá que se pueda utilizar para la telefonía móvil en la banda de 700 MHz, que volvió a manos de la administración pública tras la migración de la televisión analógica a la televisión pública. La idea es que mejore la cobertura y la penetración de la señal tanto en áreas urbanas como en zonas periféricas y rurales.