República Dominicana no es solo conocida por las playas de Punta Cana o Bávaro. El país también alberga cinco importantes minas de ámbar, la resina amarillenta que saltó a la gran pantalla de la mano de Jurassic Park. Situadas en Puerto Plata, Santiago, Cotuí, Bayaguana y El Valle, las minas son un tesoro clave para entender la historia y la evolución de los bosques caribeños, millones de años antes de que se produjera la unión entre América del Norte y América del Sur. El estudio de las piezas de ámbar recuperadas de los túneles son clave para trazar el pasado evolutivo de los animales y las plantas de esta región del planeta.
Además de los mosquitos prehistóricos fosilizados en ámbar de Jurassic Park, la investigación ha logrado descubrir nuevas especies animales y vegetales conservadas en la resina producida por el árbol Hymenaea courbaril, conocido popularmente como algarrobo o guapinol. El último resultado ha venido de la mano del equipo de George Poinar, que ha publicado en Nature Plants el hallazgo de una nueva especie de planta antigua inmortalizada en ámbar. Los fósiles encontrados pertenecen a la especie Strychnos electri y representan a las primeras plantas en ámbar del clado de las artéridas descubiertas en esta resina en el continente americano. Entre otras especies de artéridas, se pueden enumerar ejemplos tan famosos como los girasoles, las patatas, la menta, el café o la pimienta.
El trabajo muestra las fotografías de las flores inmortalizadas en dos piezas diferentes de ámbar procedentes de una mina de la Cordillera Septentrional de República Dominicana. La nueva especie descrita de estas plantas en ámbar no ha podido ser datada con exactitud, aunque los científicos sugieren que podría tener una antigüedad de entre 45 y 15 millones de años, un período anterior al tiempo en el que se produjo la unión del continente americano con la formación del istmo de Panamá. El estudio de los fósiles encontrados muestra que estas plantas en ámbar presentan un tamaño menor a un centímetro. Los investigadores también sugieren que, debido a las características de las flores, los ejemplares pertenecen al género Strychnos, el mismo en el que está la nuez vómica, árbol del que se produce la estricnina. Este alcaloide es conocido por ser un potente plaguicida y rodenticida, aunque a veces también ha sido usado para envenenar a los animales domésticos produciéndoles terribles convulsiones y en la adulteración de drogas como la heroína, la cocaína o las anfetaminas.
Según publican en Nature Plants, el registro fósil del clado de las artéridas -y en particular, de la familia Loganiaceae- es particularmente escaso. Por ello, las plantas en ámbar descritas ahora en República Dominicana pueden ayudar a conocer un poco mejor la historia evolutiva de estas especies. La investigación de los fósiles recuperados en la mina de La Búcara muestra que existe también una suerte de "Jurassic Park vegetal", en forma de mundo desconocido al que podemos retrotraernos a través de piezas de ámbar como estas. Los científicos sugieren también en el trabajo que el estudio de estas plantas en ámbar tan antiguas puede ayudarnos a entender la evolución de los bosques caribeños de la Era Terciaria. Los fósiles de estas flores, en los que aún pueden apreciarse los pétalos, son los primeros representantes descritos de la familia Loganiaceae de esta época. El trabajo de la Universidad de Oregon y la Universidad de Rutgers permite conocer un nuevo antepasado de especies tan conocidas y populares como las patatas, la pimienta o los girasoles.