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Si antes sacamos el tema antes llegan las malas noticias a las oficinas de Airbnb y Homeaway; hace escasas semanas hablamos de la capacidad que tenían este tipo de startups de economía colaborativa para esquivar las citaciones judiciales y los problemas legales, no sin ciertos esfuerzos y amenazas por algunos sectores que veían la amenaza asomar por todos lados.

De las 22 plataformas dedicadas a este tipo de turismo solo se ha multado a estas dosHoy, el Ayuntamiento de Barcelona ha abierto cuatro expedientes reguladores a Homeaway y Airbnb, dos a cada uno. Los expedientes vienen de la mano de sendas multas por un valor total de 60.000 euros. Los primeros 30.000 corresponden a la negativa de ambas startups de inscribir las viviendas que publicitan en el Registro de Turismo de Cataluña (RTC); los otros 30.000 corresponden a la propia publicitación sin los permisos necesarios. Según la declaraciones de la Teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz, expuestas en el anuncio oficial: "el objetivo de estas sanciones a las operadoras no es la multa sino detener la actividad ilegal que provoca molestias a los vecinos". Pero lo cierto es que las propias plataformas, en especial Airbnb, se han preocupado de anunciar a los ofertantes de vivienda de las novedades legales de Barcelona a través de su web:

"El Ayuntamiento de Barcelona ha introducido recientemente medidas de inspección y control más estrictas contra el alquiler de apartamentos que no cumplan con la normativa local. Os recordamos que os tenéis que asegurar que cumplís con la normativa local."

Sin embargo, Airbnb aseguró hace unos meses que no puede obligar a los ofertantes a publicar los datos de registro del RTC en su web; siendo esto algo que debe comprobar el Consistorio en caso de necesitar alguno en particular.

Estas imposiciones se hicieron afectivas este mismo verano bajo el mandato de Ada Colau, a raíz de su decisión de controlar el mercado turístico en la ciudad como consecuencia del crecimiento del impacto negativo que tenía sobre su mismo crecimiento. Con este anuncio se obligaba a que todos las personas que pusiesen sus viviendas en alquiler en dichos sitios web debían registrar sus datos identificativos con el objetivo de rastrear todos los servicios, y el el global de la actividad turística de Barcelona. En total, son 22 las plataformas que gestionan viviendas de este tipo pero la multa solo se ha impuesto a estas dos por su posición dominante en el mercado: 3.929 viviendas ofertadas en el caso de HomeAway y 1.891 en el de Airbnb.