Fiel al espíritu del Mustang original, la sexta generación del pony car emana deportividad y diversión a partes iguales, pero la mayor diferencia es que ahora ambas cualidades han sido seducidas por la tecnología, por los últimos sistemas de entretenimiento y seguridad, y por nuevas opciones basadas en aplicaciones.
Hoy vamos a dar un repaso a los sistemas más divertidos y que te harán disfrutar un poco más de la experiencia de pilotar un deportivo icónico que ha sido renovado por completo hace muy pocos meses.
Nuevos modos de conducción
El nuevo Ford Mustang puede sacar a relucir numerosas caras, modos de conducción pensados para que puedas disfrutar no solo de tu coche en un circuito sino en el día a día: para ir a trabajar, para recoger a los niños del colegio, para dar un paseo con el cielo como techo gracias a su versión convertible... Para facilitarlo, desde Ford han diseñado un control que cambia el comportamiento del coche por completo gracias a un selector.
Joel Piaskowski, diseñador principal de Ford, define al nuevo Mustang como un "precioso proyectil horizontal"
Cuatro son los modos disponibles: Normal, Sport Plus, Track y Nieve/Lluvia. Cada modo de conducción conlleva una configuración diferente en la respuesta del acelerador, la velocidad de los cambios de marcha para los Mustang con cambio automático, el control de estabilidad y la dirección. Así, el modo Normal está indicado para el día a día, un modo que doma a todos los caballos que puede generar su propulsor. Así disfrutarás de una conducción suave y refinada.
El modo Sport Plus le añade un toque de pimienta al coche para que comience a demostrar para qué ha sido diseñado. Pero cuando el piloto puede exprimir cada caballo del nuevo Ford Mustang es con el modo Track, una opción que configura al coche para que el control de estabilidad no coarte la libertad del conductor. La respuesta al acelerador es casi instantánea y la dirección se vuelve muy directa.
El último modo ha sido ideado para que en condiciones de lluvia, o incluso nieve, puedas disfrutar de tu coche con seguridad.
Sí, tiene launch control
De nada sirve comprarse un coche como el Mustang de nueva generación y no poder disfrutar de las increíbles aceleraciones desde parado que promete. De 0-100 km/h en solo 4,8 segundos, gracias al potente motor V8 de 5,0 litros que desarrolla 421 caballos de potencia. Para poder aprovecharlos desde que el coche está parado, y sin necesitar a un auténtico piloto de carreras al volante, Ford ha pensado que la mejor opción era el Launch Control, es decir, un sistema de arranque similar al que se utiliza en competición para conseguir la mayor velocidad en el menor tiempo posible.
El sistema funciona de una forma muy sencilla. Al activarlo, se ajusta la velocidad de ralentí entre 3.000 y 4.000 revoluciones por minuto para poder disfrutar al momento de toda la fuerza disponible. Si vas a comprar uno, debes probar esta función puesto que sacará esa sonrisa pícara que esperas de un coche como el Mustang.
Track Apps, la información en tiempo real en la pantalla del coche
Esta funcionalidad muestra información útil y divertida en tiempo real en la pantalla LCD de la consola para que saques el máximo partido de tu Mustang. Es la mejor función y la que más usarás si quieres disfrutar de tu nuevo Mustang en un circuito para poder mejorar vuelta tras vuelta.
Un coche con acelerómetro para medir de verdad
El nuevo Mustang incorpora un acelerómetro para poder mostrar en tiempo real la aceleración del vehículo o la fuerza de la gravedad. Un punto rojo en el centro del calibrador se mueve constantemente según la aceleración del vehículo, el frenado o el índice de giro. Para que sirva de referencia, con el motor más potente es posible alcanzar una aceleración lateral de 0,97 g.
Es la aplicación perfecta para tener datos acerca de tu conducción en pista y poder mejorar.
Con estos cuatro dispositivos vas a pasártelo muy bien conduciendo el nuevo Ford Mustang, un deportivo que sigue manteniendo su alma pero que ha sabido renovarse para aquellos conductores que buscan tecnología y deportividad por partes iguales.
