Viajar es genial, pero salvo contadas excepciones, la mayoría de nosotros no solemos tomar más de una vacación al año: el resto del tiempo, nos quedamos aburridos en casa, siguiendo la rutina habitual, haciendo las mismas cosas y yendo a los mismos lugares una y otra vez. Sin embargo, la ciudad en la que vives también cambia constantemente, y es posible que si te mantienes atrapado en tu rutina te estés perdiendo de cosas y lugares nuevos que aún no conoces, y que quizás ni siquiera sabes que existen. Es por esa razón que hoy quiero invitarte a imaginar que eres un turista en tu propia ciudad, y a explorarla con la misma caja de herramientas que utilizas cuando viajas a lugares remotos.
Aplicaciones tradicionales de turismo
Yo solía usar muchísimo Foursquare para descubrir nuevos lugares que visitar, pero desde la creación de Swarm, en mi opinión, las recomendaciones han perdido mucha calidad. Esto varía de lugar a lugar, claro, así que puedes probarlo y ver qué sale. No obstante, las aplicaciones típicas de turismo (como TripAdvisor o TripOMatic) sirven también para encontrar restaurantes que la gente en tu área recomienda, o lugares turísticos o históricos cercanos.
Nearify, una aplicación para smartphones, te muestra eventos cercanos a tu ubicación (conciertos, obras teatrales, conferencias, fiestas) con información extraída de Facebook. Otras aplicaciones, como Field Trip, te notifican cuando estás cerca de un lugar interesante, y te muestran información sobre éste. Además, **nunca está de más averiguar si tu ciudad tiene su propia página en WikiTravel**.
Acude a las redes sociales
Haciendo búsquedas de la etiqueta usada para tu ciudad en Twitter, Facebook, Instagram o la red social más popular en tu área, aparte de las fotos estándar de perritos y gente en bares encontrarás tiendas, restaurantes y otros lugares comerciales que usan estas redes para hacerse publicidad. También es posible que encuentres lugares naturales o turísticos visitados por la gente en la región que quizás no conozcas, o que te infundan nuevas ganas de visitar lugares a los que hace tiempo no vas. Las cosas cambian, y en ocasiones puede ser grato revisitar una rutina que hace tiempo habías abandonado, o un sitio que conocías pero que ha sido remodelado o renovado recientemente. Además, es probable que logres encontrar cuentas de redes sociales dedicadas a difundir los eventos que tienen lugar en tu zona; seguirlas, si no lo haces ya, es la manera perfecta para enterarte de conciertos, espectáculos y eventos que de otro modo te habrías perdido.
Y por último, aprende a prestar atención
Al final, ninguna aplicación mágica te salvará del aburrimiento por sí sola; la verdadera solución consiste en andar con los ojos abiertos, en lugar de ir acelerados dedicándonos sólo a llegar al sitio donde vamos y nada más. Camina: bájate del transporte público o estaciona el auto unas cuantas cuadras antes del lugar a donde vas; mira a tu alrededor con atención. Toma fotografías, como lo harías si estuvieras de viaje. Habla con la gente, hazle preguntas a los camareros y a las encargadas de las tiendas. En realidad, mirar una ciudad con ojos de turista no es más que verla como si fuera por primera vez, prestando atención y aprovechando las oportunidades que se presentan, lo cual no es una mala filosofía, tampoco, para aplicarla a otras áreas de la vida y más de un par de semanas al año.