Si Netflix no es a día de hoy el proveedor de contenido más importante de la red -al menos para el mercado doméstico-, poco le falta para alzarse con el trono. De hecho, con el lanzamiento de la tercera temporada de House of Cards, el 45% del total del tráfico durante ese fin de semana pertenecía solamente a Netflix. Es normal que este contexto la compañía esté experimentando con nuevas fórmulas de contenido de cara a forzar el mercado.
Si el mal llamado futuro de los contenidos está en el streaming, ya se a nuestra TV, nuestro ordenador, tablet o móvil, lo normal replantear las formas no solo en las que se distribuye el contenido, también en la que se produce y graba. Hoy saltaba la noticia de que Netflix ha producido la tercera temporada de House of Cards, que ya está disponible en la plataforma, en UHD 6K, y con ella, la esperanza de que la ultra calidad empiece a ser un estandar en la televisión.
Aunque a primera vista el hecho de grabar a esa resolución se algo innecesarios, cuando efectivamente lo próximo que tenemos en el horizonte es la estandarización del 4K o incluso del 2K, es un movimiento muy interesante desde el punto de vista de la remasterización del contenido en los próximos años. No son pocos los que han criticado que las remasterizaciones en HD de series como The Wire o Buffy no se han hecho del todo bien, y no solo por el fatídico cambio de 4:3 (estándar de la época) al 16:9 actual, más bien por la poca perspectiva de futuro en el momento de su grabación.
Netflix puede forzar a la industria a que de un empujón a la producción de contenido de TV
Puede parecer una tontería, pero el hecho de que un nuevo actor en el panorama de la producción de los contenidos como Netflix esté teniendo tanto éxito, y además se atreva con nuevos modelos de producción de contenidos, puede forzar al resto de la industria de la televisión a replantear sus modelos de distribución, precio y contenido.
El modelo de cadena de televisión que produce un contenido y lo pasa a sus horas y bajos sus condiciones se ha terminado. Netflix ha cambiado la forma en la que la industria se replantea su contenido: HBO con NOW, que rompe con el sistema de canal de cable tradicional para ofrecer un servicio independiente con su contenido, no hace más que confirmar que la tendencia del presente es el streaming. Todos quieren su parte del pastel, pero no ponen el mismo empeño.
Ahora los 6K nos parecen un paso innecesario de Netflix por ser demasiado para los sistemas actuales, pero lo único que está haciendo es asegurarse su trono, y de paso, forzar a la industria de contenidos de televisión, que en según que regiones, falta les hace.