Neil Armstrong

Aldrin junto al bolso "perdido", durante la misión. Fuente: a11NASAM

Parece mentira que 45 años después de que el primer hombre pisara la luna, la misión Apolo 11 todavía nos de sorpresas. El viejo bolso temporal de almacenaje del módulo lunar no tenía por que volver a la tierra. Pero lo hizo. Y hasta ahora nadie conocía con exactitud su contenido. De hecho, el propio Neil Armstrong no había hablado nunca del tema, bien por que no le dio importancia o por cualquier otra razón. El bolso de McDivitt que trajo de vuelta llevaba todo un elenco de souvenirs procedentes del módulo lunar entre los que se encuentra la mítica cámara de 16 mm que grabó uno de los momentos más importantes en la historia de la humanidad.

El bolso de Neil Armstrong

Por desgracia, el primer hombre que pisó la luna murió en 2012 debido a complicaciones tras una operación de corazón. Tras su triste muerte, la familia de Neil Armstrong decidió donar al museo Smithsonian una de las sorpresas más apreciadas por los coleccionistas de chucherías espaciales. El bolso del astronauta lleno de contenido, sin utilidad ninguna y con meros recuerdos de su viaje, había permanecido varias décadas guardado discretamente en el armario familiar. Tras varios años investigando lo que portaba y su veracidad, por fin lo han hecho público, poniendo a disposición del público una exposición temporal con la que disfrutar del mismo.

Neil Armstrong
Contenido del Bolso "McDavitt". Fuente: Carol Armstrong / a11NASAM

Neil Armstrong, Edwin Aldrin y Michael Collins volvieron a la tierra cargando con una serie de enseres que no quisieron dejar en el "aguila" por cuestiones prácticas, sentimentales o cualquier otra. El bolso de McDivitt, oficialmente conocido como TSB y llamado así por el comandante del Apollo 9, J. McDavitt quién sugirió su existencia, contenía diversos elementos tales como correas de casco, lamparas del traje, cintas de enganche durante el EVA, la característica "herramienta B" o la mítica cámara de 16 mm que tomó la escena de los astronautas colocando la bandera americana sobre la superficie lunar. En total 18 piezas de historia que han permanecido ocultas hasta la fecha en un armario del difunto Neil Armstrong y que fueron utilizadas por el astronauta en su histórico periplo lunar.

Magnífica desolación

El 16 de julio de 1969 el Saturno V despega transportando a los tres astronautas, el módulo espacial, el Eagle y la equipación necesaria que permitiría a la humanidad cumplir uno de los hitos más importante de su historia. Tras sin llegar a la orbita lunar sin contratiempos, y tras varios días de viaje espacial, el módulo lunar Eagle es lanzado por fin en busca de la superficie de la luna. Tras un ligero pero peligroso cambio de trayectoria, y gracias al control de Armstrong y Aldrin, el águila por fin aluniza el 20 de julio, en la tierra. Tras asentar la base lunar, consistente en el módulo y su tripulación, el comandante Neil Armstrong solicita permiso para el EVA, es decir, realizar una actividad fuera del módulo. Si bien los momentos críticos en la misión habían sido ya superados, este fue sin duda un instante que hizo a toda la humanidad contener la respiración.

It's one small step for a man, one giant leap for mankind

Nadie desconoce la mítica frase que pronunció Neil Armstrong al pisar por primera vez el suelo de la Luna: "un pequeño paso para un hombre, un gran paso para la humanidad". Y sin duda fue así. Antes de salir, Armstrong activó la cámara de 16 mm, recuperada ahora, la cual grabó el momento histórico. Al bajar Aldrin del módulo pudo escuchar a su comandante describir la escena como "la vista de una magnífica desolación". Los astronautas instalaron sobre la superficie lunar un sismógrafo y un receptor láser con el que medir con exactitud la distancia hasta la luna. También tomaron muestras y colocaron un ASLEP con diversos experimentos científicos. Por último, antes de volver al módulo, dejaron varios recuerdos con las medallas otorgadas a otros héroes de la cosmonáutica y mensajes de todo el mundo. Tras más de dos horas, el módulo se preparó para regresar al Columbia, donde esperaba Collins y comenzar el viaje de vuelta a casa.