Supongo que durante estas semanas, ahora que llevamos casi un mes y medio con el Galaxy S5 en las tiendas, más de un devoto de la marca (que los hay) con un S4 en el bolsillo estará planteándose si merece la pena dar el salto al nuevo modelo. Como pude probar ambos y aún tengo un Galaxy S4 cercano para ver qué tal ha envejecido un año después, ahí va mi opinión. Spoiler: discrepancia es salud, no pasa nada si usted, lector, piensa lo contrario. Para eso están los comentarios, para debatir.
¿Merece la pena el nuevo hardware?
Respuesta rápida: sí.
Respuesta larga: la pantalla del Galaxy S5 es muchísimo mejor que la del Galaxy S4, tanto en temperatura de color, como en ángulos de visión, como (sobre todo) en comportamiento en exteriores. Sigue siendo Super AMOLED con todo lo que esto conlleva, pero como ya anticipó el Galaxy Note 3, la calidad está prácticamente al nivel de la de un panel IPS. Así que cualquier amante de las buenas pantallas debería ver en la del S5 un factor como para merecer el cambio. Y sólo hemos hablado de pantalla.
El Snapdragon 801 es otro factor decisivo, ya no sólo por rendimiento sino por la gestión de la batería, que le deja una autonomía suficiente para alcanzar los dos días de uso moderado. Además, los nuevos acabados, sin ser dignos de pieza de museo, son bastante mejores, y además ahora el S5 es resistente al agua. Que aunque uno no piense en practicar buceo con él, siempre puede salvar de un susto.
Y por último, la cámara, esa espectacular cámara que en buena luz es de lo mejor del mercado, quedando en baja luz como una alternativa más que tampoco destaca.
¿Y el software?
Samsung ya actualizó el S4 a KitKat, así que al menos no ha hecho como otros fabricantes abandonando a su flagship menos de un año después de su lanzamiento. En general el diseño de TouchWiz mejoró mucho respecto a versiones anteriores. Yo ya me mojé: Samsung nos está preparando para Tizen con el nuevo TouchWiz, o "la teoría de los interruptores de casa". Un diseño mucho más acertado, homogéneo, limpio y agradable que ese despropósito llamado TouchWiz que nos ha acompañado durante años.
Lo que ganarás
- Mejor cámara
- Mejor batería
- Mayor rendimiento
- Mejor pantalla
- Más actualizaciones a medio y largo plazo
- Resistencia al agua y al polvo
Lo que perderás
- Menor manejabilidad
- Margen para el próximo Galaxy S
- Si lo compras antes de agosto, margen de caída del precio
Veredicto
Sí, si esperas a que baje algo más de precio. Como decía en el último punto del apartado anterior. Como explicó @SomosPostPC en El Blog Salmón, el cuarto mes es el óptimo en cuanto a caída del precio de los gama alta de Samsung antes de que se alcancen los seis meses, punto intermedio entre las dos generaciones. Así que teniendo en cuanta que su comercialización casi global fue el 11 de abril, el 11 de agosto aproximadamente sería ese punto. Aunque también es cierto que el S5 ya puede encontrarse en algunos distribuidores por poco más de 500 euros en el caso de España, nunca antes un Galaxy S bajó tan rápido de precio.
No obstante, si prefieres racionar mejor tus gastos tecnológicos, suelo recomendar dejar pasar una generación entre las dos que compremos. Por ejemplo, que quien tenga el S4 espere al S6, o que quien tenga el S3 se haga con el S5 en el caso de que quiera mantenerse en la marca y gama, igual que con los iPhone. Si puedes permitirte el salto de generación ahora mismo, recomiendo hacerlo, el salto es mucho mayor respecto al que dio el S4 respecto al S III.
Si quieres conocer más el nuevo flagship de Samsung: análisis del Galaxy S5.