Si nos remontamos al último cuatrimestre del año pasado y recordamos los primeros días del LG G2 en el mercado, entre todo lo que oíamos destacaban dos cosas: los marcos inexistentes y la pantalla. No había duda de que LG había dado con una fórmula ganadora, pasando los botones laterales a la parte de atrás para aumentar la superficie útil de la pantalla y del smartphone en general, llegando a superar el 75% de superficie de pantalla en el frontal, como podemos ver en esta gráfica de @somospostpc. Si avanzamos un poco más en el tiempo, concretamente a febrero de 2014, LG quería seguir aprovechando el tirón de este movimiento generados por ellos de "todo pantalla", y para ello presentó el G Pro 2.
LG va a superar en pantalla al resto de fabricantes, pero esto puede ser un arma de doble filo.
El LG Pro 2 llegaba aún más lejos, superando el 77% de pantalla en el frontal. Sin embargo, estos dos dispositivos de LG se quedaban cortos ante el Alcatel One Touch Hero, siendo un phablet de 6 pulgadas de septiembre de 2013 que llega a rozar el 78% de pantalla en el frontal. Pero LG ha ido acercándose cada vez más y más al Hero, y es que según GSMArena, con el LG G3 buscarían dar el golpe definitivo y superar con unos marcos aún más reducidos, no solo a Alcatel, sino dar un toque de atención a fabricantes como HTC, cuyo One M8 tiene menos pantalla a pesar de ser más grande.
Este movimiento tiene su parte buena y su parte mala. Que LG haga esto como marca de distinción en su marca, como los botones traseros es una apuesta interesante. Y también es beneficioso para aquellos que quieran una pantalla grande, sin tener que cargar con el añadido de unos marcos exagerados o incómodos, como el Xperia Z Ultra. Samsung popularizó el concepto phablet, pero sin embargo, lo que LG intenta es que dicho concepto no se vea como un bicho raro, como una especie aparte del resto de terminales. LG quiere que uses tu smartphone de 5 o más pulgadas con la menor molestia posible e incluso, si tienes manos grandes, con una sola mano.
No todos los usuarios son iguales y quieren lo mismo: esto debe tenerlo muy presente LG.
Pero también puede tener su parte negativa, y es que, como todo el resto de cosas, lo excesivo puede se contraprudecente. Un smartphone de más de 5 pulgadas para un usuario medio y sin bordes con los que poder sujetar el terminal podría hacer que el smartphone se le escapara de las manos más de la cuenta y se le cayera intentando alcanzar un borde la pantalla. LG debería intentar superarse, sí, pero sobre todo, plasmar esta filosofía de marcos al mínimo en el resto de su gama, especialmente en la gama media y baja, como ya ha hecho Sony con sus terminales utilizando el mismo diseño cuadrado y con cristales frontal y delantero.
Además este no es el único asunto por tratar de LG. En lugar de centrarse excesivamente en los marcos, LG debería tener bien en cuenta otros aspectos como el tema de mejorar su interfaz de usuario Optimus UI, y mejorar lo que han conseguido con sus botones traseros, añadiendo más funcionalidad a los mismos. Pero que conste, personalmente estoy bastante interesado en lo que tiene preparado LG para su próximo smartphone y creo que será un duro competidor para el resto de smartphones, lo cual es importante. Pero aún es más importante que LG no pierda el camino y se centre en lo que están intentando todos los demás: escuchar a los usuarios y ofrecer una buena experiencia de usuario.