El de hoy ha sido un día más que intenso con el arranque del CES y, por tanto, una jornada cargada de presentaciones de productos a cargo de Intel, LG o NVIDIA por citar algunos ejemplos. Tras la presentación de Intel, el siguiente punto de la agenda del día nos hacía poner el foco en Samsung.
Smart TVs
Lógicamente, uno de los puntos fuertes de Samsung son sus televisiones y el ecosistema e aplicaciones y servicios que gira alrededor de sus Smart TVs, un aspecto que ocupó el primer segmento de la presentación y en el que el fabricante coreano presentó la LED F8000 TV. Este televisor presenta un diseño bastante singular en el que, cara al usuario, parece que la pantalla esté flotando porque la base apenas se aprecia frontalmente, estará disponible en modelos que van desde las 46 a las 75 pulgadas y estará orientada a ofrecer el contenido con la mejor calidad posible puesto que soporta el nuevo códec de vídeo HDVC.
La LED F8000 TV es la primera televisión de Samsung que soporta un chip de cuatro núcleos, un detalle muy significativo que redundará en una mayor velocidad de respuesta (según el fabricante, el triple de velocidad que modelos anteriores) al cambiar de las aplicaciones, por ejemplo, a los canales de televisión.
Tras presentar este modelo, Samsung se detuvo en uno de los aspectos más interesantes de sus televisiones: el interfaz de usuario y el ecosistema de aplicaciones y servicios. Por un lado, Samsung ha mostrado un motor de recomendaciones (llamado S-Recommendation) con el que la televisión es capaz de ayudar al usuario a encontrar qué quiere ver entre la oferta de programas que se están emitiendo en ese momento, algo así como un asistente que nos ayude a responder la pregunta "¿qué puedo ver ahora?". De hecho, para facilitar las cosas, esa pregunta podríamos hacerla de viva voz porque también ha presentado comandos de voz (S-Voice) para gestionar la televisión.
Otro detalle presentado es la renovación del Smart Hub de Samsung, es decir, el ecosistema de aplicaciones y servicios que podemos instalar en nuestra televisión o en nuestro reproductor Blu-ray. El cambio presentado está orientado a "clarificar las cosas" puesto que rompe con el maremágnum de aplicaciones para poner orden y clasificar las aplicaciones en grupos (aplicaciones, contenidos de dispositivos conectados, aplicaciones sociales, etc).
Tras estos aperitivos, Samsung presentó uno de los "platos fuertes" de su presentación: el Samsung UN85S9, un televisor Ultra HD con una estética bastante singular (que deja de lado los típicos muebles para la televisión puesto que incluye una estructura de soporte bastante minimalista). Que esta televisión incluya su propio soporte es algo más que lógico puesto que se trata de una televisión de 85 pulgadas que aparenta estar flotando en el aire y, además, nos ofrece un dispositivo que también posee un procesador de cuatro núcleos, control por gestos y voz además de acceso a aplicaciones como Skype o Netflix.
Siguiendo por la senda de las Smart TVs, Samsung ha presentado un dispositivo que, personalmente, me ha llamado mucho la atención: el Smart Evolution Kit. ¿Y qué es este dispositivo? El Smart Evolution Kit es una pequeña caja que se acopla en la trasera de los televisores de Samsung para hacerlos "algo más inteligentes". Aunque pueda sonar raro, la idea es bastante sencilla puesto que el Smart Evolution Kit no es más que una manera de ampliar las capacidades de nuestro televisor y hacer que evolucione sin tener que cambiarlo. Imaginemos que nuestra televisión tiene algunos años y, por tanto, no puede ejecutar ciertas aplicaciones; con el planteamiento de Samsung lo único que tendríamos que hacer es quitar el Smart Evolution Kit y colocar uno más avanzado (lo mismo que hacíamos en nuestro PC al "actualizar" cambiando placa base, procesador y memoria RAM).
Todos los televisores de Samsung fabricados en 2012 llevan un slot para acoplar este dispositivo que, según parece, rondará los 200 y 400 dólares (un precio algo alto para "actualizar" un televisor). Según Samsung, el Smart Evolution Kit es una manera de alargar la vida útil de un televisor y evitar que el software se quede obsoleto, un aspecto algo complejo porque un televisor es una inversión que se amortiza a largo plazo y realizar un upgrade o un cambio de dispositivo por no poder ejecutar una aplicación no es algo que se planteen aún los usuarios.
El hogar inteligente
Tras hablar de televisores, Samsung siguió con el foco puesto en el hogar y pasó del salón a la cocina puesto que, dentro de lo inesperado, el fabricante coreano dedicó tiempo a un refrigerador. El T9000 (que nada tiene que ver con Terminator) es un refrigerador "inteligente" que viene equipado con una pantalla LCD y que encierra tras de sí un sistema Linux que nos dará acceso a Evernote (curiosa integración con la que tener acceso a nuestras recetas de cocina o la lista de la compra) y, lo más estrafalario, acceder a Twitter desde esta nevera de dos puertas (que tendrá un precio cercano a los 4.000 dólares). Además de presentar algún que otro electrodoméstico más, he de reconocer que esta nevera me ha dejado algo fuera de juego porque me parece más un producto de "demostración" que algo que pueda tener cabida en el mercado porque, en mi caso, no me veo consultando mi timeline de Twitter en la puerta de la nevera.
Otros anuncios
Además, durante la presentación también pudimos asistir al anuncio de que la tableta Samsung Galaxy Tab 10.1 estará disponible con soporte LTE para la red de Verizon, un anuncio que traerá consigo Android 4.1 Jelly Bean y, por tanto, soporte multitarea y algunas facilidades más como aplicaciones de retoque fotográfico, aplicaciones orientadas a la productividad y al trabajo además de algún guiño al ocio, por ejemplo, incluyendo Smart Remote para convertir la tableta en un control remoto universal.
También tuvimos la ocasión de ver la cámara NX300 (una cámara compacta que nos permite intercambiar los objetivos) y la gama de ultrabooks del fabricante con pantallas táctiles, Windows 8 y, en algunos modelos, apenas 2 centímetros de grosor con el portátil cerrado.
Impresiones
He de reconocer que esta presentación me ha dejado un sabor algo agridulce porque esperaba algo mucho más potente e impactante que algunas de las cosas que han mostrado. Los nuevos modelos de televisión (con procesadores de cuatro núcleos) me han parecido algo de lo más interesante, sin embargo, creo que han flaqueado en algunas cosas como el concepto del Smart Evolution Kit (una Smart TV no es un PC que actualicemos cada 2-3 años) o los "electrodomésticos inteligentes" representados por la nevera T9000 (que parece más un concepto que un producto serio).
Teniendo en cuenta el calado que tiene Samsung en el segmento móvil (incluyendo los ordenadores portátiles), me esperaba cosas más potentes en este sentido y no una presentación tan generalista en la que estos dispositivos apenas han tenido protagonismo.
