¡Bienvenidos a la quincuagésima novena entrega del consultorio del ALTFoto, queridos lectores! En esta sección respondemos todas las consultas de los lectores, sean básicas o avanzadas.

Hoy hablaremos de algunas cuestiones básicas y otras preguntas no tan comunes

Comenzamos con Pascal, que preguntó lo siguiente:

¿El tamaño del sensor importa? (digo en milímetros, no en megapixeles)

Depende. A nivel amateur, probablemente sea irrelevante el tamaño del sensor, mientras que a nivel profesional puede ser un mundo de diferencia. El tamaño de sensor es justamente lo que afecta de manera directa el factor de recorte, lo que modifica la longitud focal de las lentes. En un sensor más pequeño, las lentes se hacen más tele, mientras que en un sensor full-frame conservan su longitud original.

Por otro lado, un sensor más grande produce un bokeh más suave, debido a que toda la información "invisible" para un sensor más pequeño, cae dentro de este y por lo tanto aparece en la imagen. El tamaño del sensor probablemente te empiece a molestar una vez que tengas algunos años con una reflex y hayas jugado con varias lentes. Si estas comenzando, es un tema para omitir y dejar para después.

Seguimos con Ronal Castañeda y una pregunta que nunca me han realizado:

He buscado y no hay consenso claro para fotografiar cuadros y pinturas. Desde hace un tiempo vengo trabajando para un museo y este tema se ha vuelto recurrente. Me gustaría conocer consejos para evitar reflejos en los vidrios de pinturas y reflejos del mismo material de los óleos.

No soy un experto en la fotografía de cuadros, pero creo que el primer paso es retirar todo vidrio que este en el medio de este. Fotografiar a través de un vidrio (que no sean los propios cristales de la lente) es casi un pecado en este ambiente, ya que toman cualquier reflejo que haya en el lugar y evitarlos es sencillamente fastidioso.

En caso de que no sea posible retirarlo, al menos deberías utilizar un filtro polarizador. La siguiente tarea, tal como fue recomendado por el lector Antigonas en los comentarios, es medir todas las áreas del cuadro y comprobar que la luz que lo alcanza sea uniforme. Cualquier diferencia entre estos valores creará sombras y problemas en la imagen final.

Un ultimo consejo a tener en cuenta es el balance de blanco. Es muy importante medirlo antes de realizar el disparo definitivo, ya que una valor incorrecto va a mostrar el cuadro en colores irreales. Por más que este valor sea ajustable en postproducción, es importante en este caso obtener el valor correcto de antemano.

Finalizamos con Felipe osorio:

¿Que opciones hay para calibrar los monitores y obtener un desempeño mas fiel en cuanto a imagen?

La mejor opción es utilizar un calibrador. Es un pequeño aparato que se coloca al frente del monitor y midiendo su intensidad, color y luz ambiente, otorga la temperatura ideal junto con el brillo perfecto para la edición de fotografías. Es un paso que todo fotógrafo profesional debe realizar antes de comenzar el procesado o la impresión.

También es necesario contar con un monitor adecuado, cuestión que cubrimos en la serie de artículos acerca de la gestión de color.

Foto: FHKE

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