Un equipo encabezado por investigadores de Harvard ha dado con un avance en la detección del cáncer de piel. La identificación temprana de las células de la piel que acaban mutando y convirtiéndose en melanoma ofrecerían una nueva vía hacia el diagnóstico del tipo de cáncer, su tratamiento y prevención llegando a revertir el crecimiento del melanoma.
Y es que la pérdida de piezas en la estructura del ADN podría ser el indicativo clave para el entendimiento del cáncer de piel mortal. Aquí juega un papel fundamental el melanoma, el tipo más peligroso de cáncer de piel y la causa principal de muerte por la enfermedad en la piel. Una lacra que que ha pasado en los últimos años a elevar su tasa en los más jóvenes.
El equipo de Harvard liderado por el profesor Yujiang Geno Shi explica en una reciente publicación haber encontrado un nuevo biomarcador de la enfermedad letal. La capacidad de identificar el momento en el que las células de la piel aparentemente inocuas se convierten en melanoma.
Según los investigadores:
Hemos descubierto una conexión nueva entre la pérdida de una marca química específica en el genoma y el desarrollo del melanoma. Este trabajo es un gran ejemplo de cómo la investigación básica sobre los mecanismos de regulación epigenética pueden aportar datos clínicamente significativos que tienen un gran potencial para el diagnóstico y tratamiento del cáncer.
Tal y como cuentan, los investigadores encontraron que ciertos elementos bioquímicos en el ADN de las células normales de la piel productoras de pigmento y células benignas no se encontraban en las células del melanoma, estaban ausentes. Al parecer, la pérdida de este grupo, conocido como 5-hmC, en células de la piel, sirve como claro indicador del melanoma maligno.
Sorprendente ya que los investigadores fueron capaces de revertir el crecimiento del melanoma en los estudios pre-clínicos. Lo hicieron introduciendo enzimas responsables de la formación de 5-hmC.
Es difícil de reparar las mutaciones en la secuencia de ADN real que se cree que causa cáncer. Así que después de haber descubierto que podemos revertir el crecimiento de las células tumorales mediante la posibilidad de reparar un defecto bioquímico que existe (no dentro de la secuencia, pero a las afueras de la misma en la estructura del ADN, el estudio ofrece un nuevo y prometedor enfoque de tratamiento para el melanoma.
Un avance al que le espera un largo estudio ofreciendo una nueva vía a través de la epigenética.