Desde que se conoció el caso de Stuxnet y la central nuclear iraní hace ya casi 2 años, la seguridad de la infraestructuras críticas se ha convertido en una de las preocupaciones de muchos gobiernos del mundo y como respuesta se están creando centros especializados o cibercomandos. Siguiendo el popular dicho de que "la mejor defensa es un buen ataque", más de un gobierno realiza ya acciones de ciberguerra contra otros países u organizaciones o, al menos, lo tiene recogido dentro de sus planes de actuación. Estados Unidos, que puso en marcha en 2010 su propio cibercomando (adscrito a la Agencia de Seguridad Nacional), parece que quiere dar mayor peso a esta unidad militar dentro de sus operaciones globales y, según parece, DARPA trabaja en el llamado "Plan X", es decir, un plan que incluirá dentro de cualquier operación militar acciones de ciberguerra además de diseñar estrategias y herramientas para llevarlas a cabo.
La idea de DARPA para el "Plan X" es que, en el marco de cualquier operación militar que se desarrolle, se realicen también acciones de ciberguerra que permitan, por ejemplo, desestabilizar algunas de las infraestructuras y sistemas de "sus enemigos". Lógicamente, esto no es un proyecto sencillo y requiere de preparación puesto que primero hay que dotar al cibercomando estadounidense de una serie de herramientas que permitan lanzar un ataque sin necesidad de contar con mucho tiempo para prepararlo.
¿Y qué tipo de herramientas necesita el cibercomando de Estados Unidos? Echando la vista atrás y viendo los casos que se han dado en Irán, parece que el nombre más adecuado para estas herramientas es el de malware. Además de contar con herramientas, otro de los puntos clave será trazar "un mapa de operaciones", es decir, una especie de cartografía de Internet que permita establecer el teatro de operaciones sobre el que van a actuar y establecer planes de batalla que permitan actuar rápidamente en caso de lanzar un ataque o responder a uno recibido.
Cien millones de dólares sería la cifra que DARPA habría recibido para "armar" a los Estados Unidos en este nuevo campo de batalla porque, realmente, este proyecto es específico para armar al ejército y no es un proyecto de investigación como los que estamos acostumbrados a ver en vídeos en el canal de YouTube de esta agencia. El "Plan X" aspira, como objetivo final, a automatizar todo este tipo de ofensivas de manera que puedan lanzarse "pulsando un botón" y, quizás, desarrollar servidores que puedan trabajar de manera autónoma y detectar cualquier tipo de ataque en la red, monitorizar qué está pasando, asegurar las comunicaciones y responder al ataque.
La verdad es que los planes parecen sacados de un guión de Hollywood pero, en este caso, la realidad supera a la ficción y los ejércitos, además de luchar por tierra, mar y aire, también se preparan para luchar en Internet.