Dentro de poco dejar el cargador en casa o perderlo en algún Starbucks no necesariamente tiene que ser un dolor de cabeza. Gracias a una nueva propuesta para USB 3.0 seríamos capaces de resolver en momentos determinados y no tener que trabajar bajo presión por el porcentaje de la batería. Obviamente dejarlo en casa será un alivio en comparación a perderlo, pero el caso es que dentro de poco gracias a la nueva norma para el USB Power Delivery, vamos a poder cargar ordenadores portátiles, darle energía a discos externos, impresores y demás equipos.
La nueva norma publicada por el USB 3.0 Promoter Group y USB 2.0 Promoter Group aumenta la entrega de energía hasta 100W, un gran salto en comparación a los 4.5W de energía con los que se inició en 2008. La compatibilidad del conector no cambia pero el grosor del cable sí pero esto no afectaría en nada la estructura de ningún puerto en ordenadores. Dependiendo de la necesidad de energía del equipo se alternará entre los diferentes perfiles.
La propuesta apunta claramente a eliminar los cargadores específicos para equipos, y los primeros afectados serían los fabricantes de portátiles que siempre buscan la forma de diferenciar y que su producto se use sólo bajo su marca.
A mi parecer queda mucho por analizar, pero creo que hay más ventajas que desventajas en implementar esta norma. Como usuarios salimos beneficiados claramente, esperemos que la respuesta de empresas como Apple sea positiva porque ya Intel, HP y Microsoft, mencionar algunos, la vienen aprobando por formar parte de los grupos que proponen la nueva especificación.
Ya sólo queda esperar más detalles y beneficios, la revisión está en proceso bajo el lente de la USB Implementers Forum mientras que noticias sobre la aprobación podríamos tenerlas a finales de este año.
Foto: Monki