Cada vez estamos viendo más y más las pantallas flexibles. Interesante si tenemos en cuenta que muchas empresas tienen en mente, si se puede con la evolución que está teniendo la tecnología, crear dispositivos que puedan terminar doblándose y de esa manera ocupar menos lugar y molestar menos a la hora de transportarlos.
La gente del Flexible Display Center en la Universidad de Arizona ahora anunciaron, en un evento llamado SID Display Week que se está realizando en Boston, que fabricaron la pantalla flexible OLED a color más grande del mundo. Se trata de una pantalla de 7.4 pulgadas fue creada a partir de TFT.
El problema de este tipo de pantallas es su precio y según comentan desde la universidad el material que se utilizó es barato, así que producirlo no se convertiría en un problema.
El FDC trabajó para crear esta pantalla junto a los científicos y expertos del Army Research Labs con la intención de crear una pantalla OLED flexible que sea fina, pese poco y pueda doblarse y sufrir golpes sin romperse. De esta manera, sabemos para qué lado apuntan los dispositivos que podrían llegar a ser creados con ella.
Un gadget que podría ser desarrollado, según comentan, es una pulsera que muestre diversa información a, por ejemplo, militares aunque, lógico, podría extrapolarse a la vida cotidiana de las personas.
Lamentablemente no hay información en base a cuándo podremos ver productos que se comiencen a vender con esta tecnología, pero la universidad aseguró que esta tecnología podría ya ser comenzada a ser producida para el consumo masivo. No estaría nada mal poder disfrutar de este tipo de desarrollos. Un poco más de la ciencia ficción que venimos viendo en películas y series televisivas hace tiempo al alcance de nuestras manos.
