Tanto esfuerzo, tanta campaña, tanta presión, tanta amenaza de blockout parecer dar sus frutos. Por primera vez, el proyecto de Ley SOPA encuentra verdaderos obstáculos en el que era -hasta hoy- un camino directo hacia la intervención de internet. Vamos por partes:

Según CNN, la administración del presidente Barack Obama anunció que se opondrá a toda iniciativa de ley que reduzca la libertad de expresión en internet, aumente los riesgos cibernéticos y erosione la capacidad de innovación en la red.

¿Leyeron lo mismo que yo? De ser así, SOPA no podría tener la mínima oportunidad y chocaría contra un veto presidencial, si a pesar de todo es aprobada. Lo cierto es que con esta advertencia, la Casa Blanca entró de lleno al debate sobre la propuesta Stop Online Piracy Act, presentada por los republicanos, que busca bloquear sitios de Internet, nacionales o foráneos, que ofrezcan copias ilegales de música, películas o programas de televisión.

Textualmente, tres funcionarios de la Casa Blanca, Victoria Espinel, Aneesfh Chopra y Howard Schmidt, comunicaron:

"Cualquier esfuerzo para combatir la piratería debe proteger contra el riesgo de que se censure en línea la actividad legal".

La lectura política que hacen la mayoría de los medios es que la presión ejercida por los gigantes Google, Yahoo, Twitter y Facebook, en oposición a SOPA (amenazan con paralizar sus operaciones el 18 de enero, como protesta) empujaron la decisión de la Casa Blanca. Y no hay que olvidar la trascendencia que tuvo SOPA entre miles de ciudadanos que veían en este proyecto de normativa un claro avasallamiento sobre los derechos civiles (se podría llegar a bloquear sitios web sin juicio previo).

Al mismo tiempo -o como respuesta a esto-, tal como informó el diario El País, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos ha decidido archivar la ley y no votarla hasta unificar criterios y lograr consensos. Es decir, armonizar la opinión de republicanos y demócratas sobre la misma.

¿Es el fin de la Ley SOPA? Es apenas una herida. Seguramente nacerán variantes y buscarán coincidencias con todos los sectores. Habrá que seguir en la lucha y muy atentos. Fue la manera de presionar al gobierno de los Estados Unidos para que le de esta estocada a una iniciativa que no tenía ningún atisbo de sentido común. Y mucho de autoritarismo.

63 respuestas a “Revés para la Ley SOPA: la Casa Blanca la rechazaría y el Congreso la paraliza”