Este año tuvo un hazmerreír tech. Y ese fue HP. Estuvo en boca de todos, o mejor dicho en sonrisa socarrona de todos sus competidores. Se convirtió en el manual de todo lo que un CEO no debe hacer. ¿Ustedes se imaginan a Coca Cola diciendo que no van a fabricar más gaseosa, ya que se van a dedicar al embotellamiento? Bueno, algo así pasó con HP y la novela de su tablet, WebOS; un culebrón que incluso puso en riesgo toda su línea de producción de computadoras. Pero bueno, a pesar de todo esta historia tiene un final feliz. Repasémosla.
Pongámonos en la piel de un empleado mando-medio de HP, en este 2011 para el infarto. Hace poco más de un año le comunicaban que la mítica empresa se embarcaba hacia las aguas seguras del mundo post-PC con la compra de Palm y el nacimiento de la tablet TouchPad. Una coqueta tableta que corría el sólido sistema operativo made in Palm, Web OS.
Después, su CEO de entonces, Leo Apotheker, anunció -como si nada- que “mejor no”, que cambiaron de idea, que iban a cancelar las tablets y todo lo que tuviese la palabra WebOS en algún lado.
Acto seguido, el alegre de Leo también avisó que, de paso, tirarían por tierra años y años de desarrollo (y liderazgo en el rubro hard) y se sacarían todas las PC de encima, para enfocarse en servicios para empresas. Así es, le darían off a la línea de producción, para convertirse en soporte de software y consultoría... Se habían tomado aquello del fin de la PC más a pecho que nadie.
La junta directiva, ni bien pudo reponerse del estupor inicial ante estas apocalípticas declaraciones, reaccionó rápido y -mientras los stores de computación liquidaban a precio de risa el remanente de tabletas con el loguito HP- mandaron a Leo que buscara sus pertenencias en una caja de cartón.
Tal como informó ALT1040, lo que vino después del mal paso de Apotheker fue tan sólo enderezar la nave e intentar salir del bochorno del año con dignidad. La llegada de Meg Whitman como nueva CEO supuso un cambio en la compañía y así fue como, después de especulaciones sobre la venta del sistema operativo al mejor postor, HP tomó la "sabia" decisión de declarar a WebOS software libre.
HP liberará el código de este entorno basado en Linux y, además, seguirá contribuyendo al proyecto desarrollando y ofreciendo soporte, eso sí, gracias a este movimiento, HP espera que pueda propiciarse el nacimiento de una comunidad de desarrolladores alrededor del proyecto que contribuyan a su crecimiento.
Las razones del fracaso
A todo esto, ¿por qué creen que fracasaron WebOs, y sus productos, como el TouchPad?
El contexto realmente fue duro. iOS estaba enfocado en un software de alta calidad apoyado en iTunes. Android fue el gran sistema operativo masivo, con orígenes abiertos y con grandes posibilidades para los usuarios. Kindle tenía detrás la fuerza de Amazon. Y WebOS... no tenía nada más que buenas intenciones.
Otra explicación sencilla por aquí: el cáncer de todo player de peso pesado: lanzar un buen producto... sin buena cantidad de aplicaciones. O sin el consenso necesario en la industria para que ni bien salga a la venta, estén detrás cientos de desarrolladores tratando de sacar su tajada. Lo sufrió en su momento Apple, lo vivió Sega, ¿por qué no le podía pasar a HP o a Palm?
Sin ir más lejos, hace dos años, según cifras oficiales, iOS hacía gala de 150.000 aplicaciones contra las prometedoras 20.000 de Android, y sólo 1500 de Palm. Hoy los sistemas líderes (iOS o Google) han superado las 500.000 y el pobre de WebOS, poco más de como estaba entonces, con 15 mil aplicaciones, de las cuales muchas de ellas son nativas de Android modificadas. Y encima, con el cartelito "en suspenso permanente". ¿Vendrán los desarrolladores independientes al rescate de este entorno?