El viernes conocimos un inquietante robot de forma humana que se había diseñado para probar los trajes del Ejército de Estados Unidos aunque, más que un maniquí con movimiento, daba la sensación de estar delante de un robot destinado al combate. Afortunadamente, no todos los usos de la robótica tienen su origen y su destino en aplicaciones militares y, además de estar presentes en la industria, también pueden servir para hacer más fácil la vida de las personas con dependencia. Hemos conocido casos de asistentes robóticos e incluso enfermeros, prototipos que intentan ayudar a personas con movilidad reducida y a los que se unen una gama de asistentes diseñada por Toyota y que esperan poder lanzar al mercado en el año 2013.
Toyota ha presentado una familia de prototipos orientados a las personas con movilidad reducida y, para ello, ha desarrollado varios productos como el Walk Training Assist que consiste en una prótesis para la pierna que detecta el movimiento de la cadera y hace que la pierna se mueva (un dispositivo destinado a personas que han sufrido parálisis en la pierna, por ejemplo, por una apoplejía o cualquier otro accidente cerebrovascular) gracias a unos sensores en el muslo y en el pie que captan el movimiento y ponen en marcha la prótesis para que la rodilla y la pierna se muevan.
Otro de los productos es el Independent Walk Assist, un dispositivo orientado a los pacientes de rehabilitación que tienen que aprender de nuevo a caminar. Este dispositivo está diseñado para guiar los movimientos que debe dar la pierna y, además, soportar el peso del paciente para que éste vaya recuperando el equilibro. Conforme el paciente va avanzando, el dispositivo va soportando menos peso (y haciendo que lo cargue el paciente), avanzando poco a poco en su recuperación. El tercero de los productos de Toyota también está destinado a la rehabilitación de los pacientes y consta de una plataforma en la que, simulando juegos deportivos (tenis, fútbol o baloncesto) el sistema hace que el paciente cambie el peso de su cuerpo (de una pierna a otra).
El cuarto de los dispositivos de Toyota está orientado a los cuidadores y enfermeros puesto que es un sistema que ayuda a trasladar los pacientes mediante una plataforma móvil que sirva para levantar a los pacientes y trasladarlos, por ejemplo, desde su habitación al baño sin que la espalda del cuidador sufra y, lo que es más importante, sin que el paciente esté sometido a movimientos bruscos.
Quizás a muchos les pueda sorprender que Toyota esté trabajando en este tipo de proyectos pero la compañía está comprometida con la robótica desde hace ya 6 años, momento en el que crearon una división de robótica que emplea a unas 200 personas y que ha desarrollado robots para el sector sanitario, la industria, el transporte, la gestión de almacenes y, en algunos proyectos más vistosos, robots que son capaces de tocar música. En este caso concreto, los cuatro sistemas son fruto de una colaboración con el Hospital de la Universidad de Salud Fujita en la prefectura de Aichi, cuyo equipo médico colaboró en la ingeniería de requisitos de los sistemas.
Aplicaciones bastante nobles que, ojalá, no tarden mucho en llegar.