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En el desierto de Atacama, en Chile, se encuentra el que, hasta ahora, es uno de los más grandes y complejos telescopios que el hombre haya jamás construido, el Telescopio Alma (Atacama large milllimetre/submillimetre array) (Alma), cuyo propósito es el estudio del origen del universo y los procesos que se siguieron hace cientos de millones de años que dieron origen a las estrellas y éstas brillaron por primera vez.

El Alma, además de ser uno de los telescopios más grandes que se conocen, es el fruto de una intensa labor de ingeniería (que arrancó en el año 2003) puesto que se ha construido en un lugar bastante recóndito y a una gran altura. El sistema está compuesto por un sistema que sería capaz de acoger hasta 60 antenas dispuestas en la parte superior de la meseta más alta del desierto de Atacama (en la frontera de Chile con Bolivia), a 3.000 metros de altura sobre el nivel del mar. Gracias a la adición de más antenas, el telescopio es capaz de ampliar su capacidad (y resolución), ofreciendo mayor detalle a los investigadores.

Alma antena

Según el responsable de la instalación, el Dr. Diego García, con la puesta en marcha de la instalación la humanidad está a punto de entrar en la edad de oro de la astronomía. Y puede que no le falte razón porque con este sistema se pretende identificar cómo se formaron las primeras galaxias:

Vamos a ser capaces de ver el origen del Universo y cómo se formaron las primeras galaxias. Vamos a aprender mucho más sobre cómo funciona el universo

Alma acaba de poner en marcha su antena número 20, lo cual ha permitido registrar eventos que, hasta ahora, nunca se habían podido visualizar. El Observatorio Europeo Austral, uno de los socios del proyecto, ha publicado las primeras imágenes tomadas por Alma que muestran la colisión de dos galaxias (conocidas como las Galaxias Antennae). Si bien este tipo de fenómenos pueden ser vistos mediante telescopios como el Hubble, Alma es capaz de recoger luz no visible para el ojo humano y enfocar nubles densas de gas frío que dan origen a nuevas estrellas. Estas primeras imágenes se tomaron con tan solo 12 antenas, si bien la resolución y nitidez irá aumentando conforme se vayan añadiendo más antenas al conjunto (que podría llegar a tener 66 en el año 2013).

Uno de los primeros proyectos a llevar a cabo con Alma es la observación de una estrella muy joven, AU Microscopii (que tiene un 1% de la edad de nuestro sol) y que se cree tiene un anillo a su alrededor en el que se está dando el proceso de coalescencia que podría formar nuevos planetas. De hecho, también están observando a otra estrella joven (HD 142527, situada a 400 años luz de distancia) que podría formar una docena de planetas del tamaño de Júpiter.

El proyecto, bajo mi punto de vista, es doblemente bello. Por un lado, las investigaciones a desarrollar sobre el origen del universo me parecen fascinantes pero, por otra parte, la construcción de este sistema es toda una maravilla de la ingeniería moderna.

La magnitud del proyecto de ingeniería, su complejidad técnica y lo que este equipo va a lograr en términos de nuestra comprensión del universo va a ser todo un homenaje a la humanidad