Durante estos días hay circulando por la red un gráfico curioso que ha realizado un usuario de teléfonos inteligentes. Más concretamente posee un iPhone 4 y un Samsung Galaxy SII. En su post, Dustin Curtis intenta averiguar cuáles pueden haber sido las razones por las que Apple escogió el camino de las 3,5 pulgadas en su terminal cuando otros fabricantes están evolucionando hacia tamaños más grandes.
Una de sus conclusiones llegó cuando tuvo que utilizar el Galaxy para manejar la aplicación de Google Maps con una sola mano, se dio cuenta de que es prácticamente imposible alcanzar algunas partes de la pantalla con facilidad, obligándole a poner el smartphone en una situación comprometida o a hacer gestos complicados con la muñeca. El resultado puede observarse en la imagen adjunta, la zona verde sería el área que un individuo de tamaño medio sería capaz de alcanzar sin problema sujetando el teléfono con una sola mano.
¿Será esta la razón que ha empujado a Apple a conservar el tamaño actual, o nos encontramos en un momento de transición hasta que un nuevo modelo, más grande, llegue el año que viene? No lo sabemos porque la compañía de Cupertino no se ha pronunciado al respecto. Lo que sí parece evidente es que hay un problema al respecto en tamaños más grandes. Justo cuando leí esta noticia este fin de semana tenía mi disposición un Galaxy SII de un amigo e hice la comprobación. Dejando dicho que soy alto y con manos grandes aún así no me resultó fácil alcanzar con el dedo toda la extensión del cristal, de modo que este diseñador puede tener algo de razón.
Aún así no creo que sea el único motivo por el que los de la manzana han decidido conservar las formas. Otro habría que contrarlo en la búsqueda de la diferenciación. Si para algo ha servido la pasada keynote es para dejar clara constancia de que Apple va a su aire sin prestar mucha atención a lo que hacen los demás. Nada de incrementar excesivamente la velocidad de proceso, o la memoria, o el diseño, ellos son Apple y su marca es el iPhone, y debe ser diferente a los demás, una propuesta distinta. De este modo se están protegiendo respecto a los demás. Si entrasen en una carrera por tener el dispositivo más grande, más rápido, más potente, rápidamente saldrían vencidos por las decenas de competidores. Si en cambio se pone el acento en la diferencia, en el ecosistema general y una experiencia inmutable, conocida y agradable sí tendrán posibilidades de éxito en el futuro.
Por último otra consideración a realizar se centra en el iPad. En la empresa que ahora comanda Tim Cook el tablet es una de sus mejores bazas de cara al futuro y hay que potenciarlo al máximo. Hacer un iPhone más grande sería desdibujar las diferencias entre ambos, llenando un hueco que no interesa eliminar, sino acentuar. Por tanto, se pretende que el individuo se haga con los dos aparatos, cuando desee movilidad fuera de casa mejor un iPhone, pequeño, con mucha batería y manejable, cómodo de llevar en el bolsillo. Si en cambio es el momento de ver una película o leer un libro porque nos encontremos en un lugar concreto, parados, mejor utiliza tu iPad que ofrecerá una experiencia más gratificante.
A grandes rasgos esto es lo que puede haber pasado hasta ahora aunque no excluye que en el futuro los californianos tomen otro rumbo. De hecho, en lo personal me habría gustado mucho ver un iPhone 4S con un tamaño de 3'7 pulgadas. Como siempre hemos dicho aquí, todo cambiará a medida que estos sectores recién aparecidos maduren, en ese momento deberán diversificar las familias en el mercado de forma parecida a como ya ocurrió con el Mac o el iPod en el pasado.
Imagen: uludagsozluk