Amazon S3 es un servicio de almacenamiento que a muchos os sonará y conoceréis por ver en las direcciones URL de muchas de vuestras aplicaciones y servicios favoritos. Enfocado a empresas y otro tipo de negocios, Amazon Simple Storage Service, lejos de fracasar como apuntaban algunos hace tiempo, ha doblado su uso en tan sólo un año, y con uso queremos decir su contenido.

A finales de 2010, Amazon almacenaba 262.000 millones de objetos en su servicio S3, un contenido que a día de hoy casi se ha duplicado, con 566.000 millones de objetos, el equivalente a 82 objetos por cada persona de este planeta. Los datos son, sencillamente espectaculares, y más aún si contamos que el servicio es usado por clientes de más de 190 territorios diferentes.

Aunque como os contaba al principio, se utiliza especialmente por desarrolladores de aplicaciones web y móviles, cada vez es más el número de usuarios que lo utilizan con otro tipo de aplicaciones, como consecuencia del cada vez más creciente uso de tecnologías centradas en la nube.