China es ahora mismo, en estos precisos momentos, el objetivo deseado por todas las empresas de tecnología. Posee un crecimiento notable a pesar de la crisis, unos usuarios que aman y saben estar al día en dispositivos electrónicos y por último ofrece una enorme población de clientes potenciales. Es por eso que Baidu, la empresa de búsquedas local, está reforzando su presencia digital mediante una nueva plataforma móvil basada en Android.

El pasado viernes fue presentado este nuevo ecosistema móvil llamado Baidu Yi, que debe considerarse como una versión altamente modificada del sistema operativo de Google. Si bien sus fundamentos provienen del robot verde, parece estar claro que Baidu pretende a la larga generar su propio código base con el que introducirse en millones de teléfonos móviles. Mientras tanto, ha provisto de las herramientas necesarias para que los desarrolladores puedan crear aplicaciones propias para la plataforma.

Debemos recordar que Baidu es en realidad un servicio que compite con Google prácticamente a todos los niveles, no solo es un buscador, es una red social, un servicio de mapas, un reproductor musical... Es por eso que todos los productos Google presentes en Android serán sustituidos por sus homólogos chinos en Baidu Yi, especialmente el motor de búsquedas y los mapas. Dudo que esta adaptación sea bien vista desde Mountain View, en realidad se trata de una enorme paradoja, sobre todo tras la salida de los americanos del país asiático el año pasado.

En contexto, este movimiento de Baidu debería verse como un método para reforzar su presencia y hegemonía en el gigante rojo. Si bien Apple y otros están teniendo un considerable éxito al introducir sus plataformas de software en el país (Apple por ejemplo está a punto de abrir su tercera Store esta vez en Hong Kong), la empresa local no está dispuesta a perder cuota y es por eso que incluso acaba de cerrar un acuerdo con la estadounidense Dell a fin de que esta le provea los dispositivos electrónicos necesarios para la nueva plataforma, léase tablets y smartphones que por ahora no han tenido una grata experiencia de ventas en América.

En definitiva, parece que el juego futuro donde se establecerán las posiciones globales de la compañías tecnológicas se jugará en campo chino y todas las empresas ya están tomando sus lugares de salida para tan importante batalla.