No se conocen siquiera sus especificaciones técnicas concretas, pero ya hemos hablado más de los Ultrabooks que de muchas otras plataformas que están realmente en el mercado. La última noticia viene de la mano de Digitimes, que ha elaborado un nuevo informe sobre los materiales de fabricación. Existe una escasez en los materiales (aleaciones) usadas en los chasis de aluminio para ordenadores portátil con lo que los fabricantes podrían verse obligados a producir Ultrabooks de fibra de vidrio.
A pesar de que Apple haya decidido metérnoslo por los ojos, nunca se ha establecido que un cuerpo de aluminio signifique mayor calidad en un ordenador portátil. Existen materiales más duros, más duraderos, e incluso más agradables en términos de diseño que dotarían a cualquier equipo de una gran elegancia y calidad de construcción. La fibra de vidrio podría ser uno de estos materiales. Desde hace muchos años, el mundo del automóvil se ha visto inundado de grandes superdeportivos de las más prestigiosas casas fabricados con fibra de vidrio, que ayuda a reducir el peso del conjunto por su gran ligereza, y este hecho nunca se ha visto desde un prisma negativo.
Los principales fabricantes de chasis de aluminio para ordenadores portátiles suministran la mayor parte de su producción a Apple, que hace un uso extensivo de este material en la construcción de la mayor parte de sus ordenadores —de hecho, con la desaparición del macbook de policarbonato, el aluminio se usa en todos sus equipos— dejando una disponibilidad muy baja para otros fabricantes y ensambladores. Sin embargo ha salido a la luz un fabricante de chasis de fibra de vidrio llamado Mitac Precision, con origen en Taiwan, que asegura poder fabricar un chasis para ordenadores portátiles prácticamente igual de fuerte que uno hecho en aluminio, pero que resulta entre 5 y 10 dólares más barato de producir que las aleaciones de magnesio y aluminio utilizadas por otras compañías. Esto permitiría reducir el precio final en el mercado de cualquier laptop entre 50 y 100 dólares.
Ante la poca disponibilidad de chasis de aluminio, fabricantes como Asus, HP o Acer podrían plantearse la posibilidad de estudiar un cambio a este tipo de carcasas no metálicas, que podrían ser cruciales para producir ultrabooks económicos. A mi parecer, dadas las propiedades de disipación de calor del aluminio, no se hasta que punto se conseguiría controlar la temperatura de este tipo de equipos, que suelen usar sistemas de refrigeración pasivos, si se embuten en diminutos cuerpos de fibra de vidrio.