Una de cal y otra de arena. Hace unos días nos alegrábamos por la magnífica noticia que suponía que los Países Bajos regulase la neutralidad de la red por ley. Y por el contrario ahora tenemos a la policía de Dinamarca, que propone acabar con el anonimato en Internet.

El motivo es nada más y nada menos que luchar contra el terrorismo.

La idea es que la policía o el servicio de inteligencia de la policía, con los datos de conexiones de red abierta será capaz de investigar el terrorismo con más eficacia que cuando se está conectado a una red abierta.

Dicho de otro modo, lo que quiere la policía danesa es que los proveedores de acceso vayan a dar acceso a los usuarios estos tengan que ser identificados de algún modo y lógicamente, tendrían que guardar registro de los usuarios y entregarlo a la policía en caso de que fuese necesario.

¿Nos estamos volviendo locos? La propuesta realizada por este grupo de trabajo simplemente me parece dantesca. Y es que estamos hablando de que los usuarios tendrán que estar identificados constantemente mediante un código personal, lo que significa que se sabrá los lugares que visitan, así como cualquier tipo de comunicación que pueda tener el usuario.

La llegada de un sistema como se significaría decir adiós al derecho a la privacidad y el secreto de las comunicaciones, dando la bienvenida a un sistema que podría ser usado con mucho más formas que no van en beneficio de los usuarios. Tener mayor control de lo que sucede en Internet claro que podría hacer que la lucha con el terrorismo fuese más eficaz, pero si nos ponemos en ese plan, no salgamos de casa a toda cosa para evitar que un atracador nos asalte.

Sorpresa es una de las palabras que me asaltan ahora mismo. Sorpresa por ver como en países supuestamente civilizados, del primer mundo, todavía surgen ideas represivas. Pero quizá no me debería sorprender para nada.

Vía: Bitelia