Parece ser que la administración norteamericana esta investigando a Google por mostrar ilegalmente anuncios de farmacias online y otras empresas que se dedican a la venta de medicamentos de dudosa procedencia y que operarían fuera de la ley. La noticia surgía el martes, y ese mismo día Google anunciaba en una reunión de control de cuentas que ha destinado 500 millones de dólares con la intención de llegar a un acuerdo que resuelva la disputa y cierre la acusación. Lo que dice concretamente el acta es que el dinero se emplearía en "la potencial resolución de una investigación del departamento de justicia de EE.UU. sobre el uso de la publicidad de Google para algunos anunciantes".
Sin embargo no hay más detalles, y tanto Google como el departamento de justicia se han negado a hacer declaraciones. Lo que si se sabe es que durante algunos meses Google ha estado intentando hacer una limpia y librarse de las farmacias ilegales. Por farmacias ilegales se entiende que son las que venden medicamentos sin la obligatoria receta médica, aunque hay muchos casos en los que se venden incluso medicamentos retirados y otro tipo de irregularidades.
Además, Google ha hecho importantes modificaciones en sus políticas de aceptación y rechazo de anuncios, la última en enero, y aunque el problema se ha reducido, las empresas siempre encuentran algún resquicio para saltárselas y seguir publicando legalmente sus anuncios.
No es seguro que las autoridades vayan a multar a Google, y menos después de los esfuerzos para evitar este tipo de empresas, aunque como dice el refrán, más vale prevenir que curar, y tal vez por eso la compañía de Mountain View ha reservado los citados 500 millones. Casi nada.