Si se lo piden, el vuelve. Así de rotundo se ha mostrado Steve Wozniak en una entrevista que le preguntó sobre su posible mayor implicación en Apple:
Lo consideraría, por supuesto.
Para los menos instruídos recordar que Wozniak fue uno de los fundadores de la compañía en 1976 junto a Steve Jobs y Ronald Wayne, dejando su trabajo a tiempo completo en 1987 aunque manteniéndose como empleado y accionista.
Desde entonces hemos sabido de él más por sus múltiples actos filantrópicos y ponencias que por una participación activa en la compañía que lo ha hecho célebre (si no ha sido a la inversa). Es por ello que sus hipotéticas aportaciones resultan noticiables, pues su influencia es tanto o más alargada que la de Jobs.
Ha dicho el considerado genio técnico tras Apple:
Sé un montón de cosas significativas sobre los productos de Apple y los de sus competidores que podrían resultar útiles. Mis propias impresiones, más que nada.
¿Qué podría aportar Wozniak más concretamente? Una Apple más abierta, opuesta al excesivo hermetismo de sus productos actuales, que viene a considerar en cualquier caso éxitos cualitativos sin precedentes:
Creo que Apple puede ser más abierta y no perder ventas, aunque seguro que se están tomando las decisiones que mejor convienen a Apple, no me cabe duda.