Y sigue la guerra entre Sony Ericsson y el emulador de PS1 para Android PSX4Droid, tras el episodio que vimos hace unos días donde Google retiró del Market a esta aplicación argumentando una dudosa "Content Policy Violation".
En este nuevo capítulo, ZodTTD (como se conoce al creador del programa), comunica que le han sido bloqueados sus accesos al Market, imposibilitándole de esta manera a publicar nuevas aplicaciones. Así que ha modo de contraataque, ha decidido poner a disposición de todo el mundo una nueva versión mejorada del emulador de forma gratuita, mediante descarga directa desde su web.
Faltaría saber la opinión de Google al respecto, y es que en Engadget se menciona un sospechoso "No podemos confirmar la historia de ZodTTD de momento, y hemos oído que las cosas podrían no ser tan simples como él menciona".
En cualquier caso, hay varias cosas claras. La primera es que Google ha eliminado una aplicación del Market basándose en una explicación que no tiene ningún sentido. Y es que tanto PSX4Droid como otros varios emuladores (incluídos otros de PS1) han estado durante mucho tiempo disponibles en el mercado, sin ningún tipo de bloqueo. Si cierras uno por violación de derechos, debes cerrarlos todos... a no ser, claro, que el cierre actual venga motivado como "favor" a Sony Ericsson (favor debidamente incentivado, por supuesto).
Aquí viene la segunda cosa clara, y es que el cierre de esta app ha coincidido en el tiempo con el lanzamiento del Xperia Play, ese terminal que permite jugar a títulos de la PS1. Lo mismo que puedes hacer con, oh casualidad!, PSX4Droid. ¡Un momento! ¿He dicho lo mismo? Perdonad, me he confundido. Había olvidado que este emulador permite jugar gratis (previa descarga de ROMs de otras webs), mientras que Sony Ericsson está cobrando 6/7 USD por juego. Claramente, una competencia "desleal" que no les conviene.
La última cosa clara, es que por mal que le haya sentado el cierre a ZodTTD, todo esta situación le está generando una publicidad gratuita que ya le hubiera gustado tener anteriormente. Ya sabéis: hablen bien o mal, lo importante es que hablen de ti.
