Las revueltas en Egipto contra el presidente Hosni Mubarak han acaparado los espacios informativos durante los últimos días. Aferrado al poder, el mandatario egipcio se niega a soltar su silla a pesar del clamor popular, tanto de su gente como de la comunidad internacional. Mientras el mundo continúa su batalla para extirpar al dictador, nosotros aprovechemos que ya es viernes (¡al fin!) para ponerle un poco de humor geek a la situación. Con ustedes, un listado de siete dictadores del mundo del cómic que, seguramente, hacen palidecer de envidia de Mubarak.

5. Dr. Doom

Comencemos por un clásico. Victor Von Doom es, probablemente, el dictador más reconocido en todo el universo Marvel. Mandamás en Latveria, ha establecido un régimen totalitario basado en el dominio tecnológico. Son muy conocidos los Doombots: robots antropomorfos hechos a imagen y semejanza del Dr. Doom, muchas veces suplantándole en misiones peligrosas. A pesar de las críticas que recibe desde el exterior, al interior de su país, Von Doom es apreciado por la estabilidad que ha llevado al país. Al final, la supremacía tecnológica de Latveria lo convierte en un estado beligerante y militarizado, una de las naciones más peligrosas en el escenario internacional. Desde siempre, Dr. Doom ha sido retratado como el arquetipo de dictador, incluso en líneas alternas donde sí consigue su objetivo de conquista mundial, como en su versión 2099.

4. Angmo-Asan (The Red King)

Angmo-Asan, también conocido como el Rey Rojo o el Emperador, es el tirano que gobierna el planeta Sakaar. Todo iba viento en popa en su reino opresor, hasta que una nave espacial choca contra su mundo. Resulta que, para desgracia del gobernante, en ese vehículo iba Hulk. Angmo-Asan llegó al poder tras salvar a los habitantes de Sakaar de una plaga infernal. Desde su trono, creó un coliseo para confrontar a los prisioneros con bestias colosales. Por supuesto, Hulk logra librar el desafío y planta cara al Emperador. Al final, el Rey Rojo cae derrotado, aunque como hierba mala nunca muere, consigue incluso sobrevivir a una explosión que diezmó a más de la mitad de los habitantes de su mundo.

3. Superman: Red Son

¿Qué hubiera pasado si Superman, en lugar de aterrizar en la tierra de la libertad (sic), hubiera caído en la antigua Unión Soviética? Superman: Red Son, de Grant Morrison Mark Millar, es una miniserie que resuelve esta cuestión. En una reinterpretación basada en la tensión de la Guerra Fría, Superman es el hijo predilecto de la URSS, paladín del comunismo y defensor del proletariado. Tras enfrentarse con Lex Luthor --esta vez, un científico brillante de S.T.A.R-- el Camarada de Acero (¿o deberíamos decir "de la Cortina de Hierro"?) decide usar su poder para crear una utopía. En cuestión de años, Superman logra una Unión Soviética Global, con Estados Unidos (o mejor dicho, los que solía ser EE.UU) como único territorio sin conquistar. Por el lado bueno, Superman ha erradicado la pobreza, el crimen y el desempleo; por desgracia, también las garantías individuales.

2. Apocalypse

Uno de los tiranos con una historia más rica en todo el universo Marvel es Apocalypse. Nacido en Egipto en el año 3000 antes de Cristo, este mutante ha pasado entre generaciones conquistando territorios y devastando civilizaciones. Gracias a sus poderes, su aprendizaje a través de las eras, su dominio de las estrategias bélicas y el uso de tecnología alienígena, es un villano formidable. Aunque la conquista global es un leitmotiv del personaje, en dos sagas es en las que se luce como un tirano. En primer lugar, en Age of Apocalypse, en la que consigue el dominio global tras la muerte de Charles Xavier. La otra, en House of M, en la que Magneto lo nombra lugarteniente en el norte de África, donde obliga a la gente a que lo adoren como un dios, e incluso, los manda a hacerle una pirámide.

1. Darkseid

Honor a quien honor merece. Darkseid es el arquetipo del régimen totalitario. El villano es el jerarca de Apokolips, planeta en el que se le venera como a un dios. Su población se encuentra en la profunda esclavitud, ya que la mayoría de ellos sólo existe para adorar al tirano y trabajar incansablemente en los pozos de fuego y fábricas de armas. Además, el poder bélico de Apokolips está para poner a temblar a casi cualquier otro mundo en el universo, amén de que también se dedica a proveer de armamento a otras civilizaciones beligerantes. ¿Por qué está en el puesto de honor? Más allá de las obvias razones, su mayor logro se da en Final Crisis, cuando prácticamente consigue adueñarse de la realidad. Ése es un tirano para ponerse de pie, señores.

Agradecimientos especiales a mi amigo Gibrán Aquino, sin cuya participación no habría sido posible esta recopilación.

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