Como varios ya sabrán la señora ministra de cultura española, Ángeles Gónzalez-Sinde, ha vuelto a la carga en las últimas horas mediante un artículo publicado en El País bajo el título “El adversario es otro”. El mismo llega justo hoy, día en el que PP y Gobierno están agotando sus últimos cartuchos para revivir en el Senado la vapuleada en el Congreso “Ley Sinde”, supongo que con el objetivo de conciliar y mitigar así la presión popular que soporta la norma. Pero desgraciadamente lo único que ha conseguido Sinde y su artículo, otra vez, es crispar los ánimos de la mayoría.
De manera resumida en el mentado texto Sinde demuestra nuevamente lo alejada que está del gran debate sobre propiedad intelectual que parte de la sociedad española mantiene desde hace meses y continúa con su discurso de salvadora cultural. Y es que según entiende Sinde, los que estamos contra “esa ley que popularmente se conoce con el apellido de mi abuela” --dice ella en el artículo-- también lo estamos contra "la gente de la cultura”. Craso error.
Todo el mundo sabe --o debería por que ha quedado claro en cientos de artículos-- que el grosso de los opositores a la “Ley Sinde” no tiene absolutamente nada contra los creadores (bueno, contra los que no saben hacer otra cosa que menospreciar sí) sino más bien contra la actual obsoleta industria y todas aquellas organizaciones, leyes y voceros que, enarbolando la bandera de la protección cultural, buscan blindar un panorama obsoleto matando por el medio la innovación y derechos fundamentales que le pese a quien le pese están por encima de la propiedad intelectual.
Por otro lado “El adversario es otro” es también la prueba no sé qué número de lo enquistadas que están en la cabeza de Sinde las cospiranoicas teorías de los grandes actores de la industria (por ejemplo que la desaparición de los actuales modelos de comercialización y distribución significaría la inanición de la cultura) que la impiden ver más allá de lo de siempre, lo que a su vez nos ha llevado hasta la complicada situación por la que pasamos hoy en día.
Rematando la jugada en el artículo Sinde habla de “jóvenes hastiados” y suelta otras perlas completamente desafortunadas y erradas tales como “podría decirse incluso que para muchos sus vidas virtuales son mejores que las reales” entre las que se entrevé otro de los grandes problemas: no entiende que la crispación responde a la incapacidad mostrada por actores de la industria y afines de dialogar con mente abierta y adaptarse a los cambios del mercado que les están pasando por encima, no a que los opositores seamos jóvenes enfadados con el mundo o algo así.
Terminando cierro este post recordando la mítica frase pronunciada por el rey de España en 2007, con alguna modificación, y entendida en este caso no como reprimenda sino como recomendación ya que el artículo de la ministra no aporta aporta nada nuevo al debate ni tampoco se puede considerar un intento conciliador que digamos. Así que para esto, Ángeles Gónzalez-Sinde, ¿por qué mejor no se calla?. Todos, incluida usted espero, queremos acercar posturas, a lo que el artículo que nos ocupa no ayuda y con unas cuantas muestras de ello en forma de tweets os dejo:
Confundir una sociedad más democrática, con más voces y más justa con más gente viviendo del cuento #leysinde http://tinyurl.com/4d4lwz4
De como los internautas somos tontos y no nos damos cuenta de que los malos no son ellos, según Sinde, #leySinde http://t.co/YvYo8B9
#leySinde La ministra se enreda con un artículo en El País poco práctico y sin avance para mejorar la prop intelect y los defectos de la ley
Mi detector de demagogia acaba de estallar http://t.co/LllXt9i #leysinde
La táctica Sinde, SGAE : "Una mentira repetida 1000 veces se convierte en verdad" J. Goebbels #leysinde
"La piratería acabo con Melies"... que alguien me pase un ladrillo, por favor