"Lo que no nos mata nos hace más fuertes". Eso es lo que se han propuesto demostrar algunos investigadores de la Univeridad Emory de Atlanta y la Universidad de Chicago mientras tratan de descubrir una vacuna universal contra la gripe. Los científicos encontraron que muchos pacientes que habían sufrido la influenza H1N1 durante la epidemia del 2009 desarrollaron anticuerpos capaces de combatir varias cepas de este virus, lo que nos podría traer una vacuna efectiva contra prácticamente todo tipo de gripa.

La gripe no es producida por un sólo virus, sino por una familia completa de ellos que ha demostrado ser muy resistente contra muchos tratamientos. Es por eso que se torna tan difícil encontrar una sola vacuna contra todas sus variantes.

Los científicos estudiaron a un grupo de nueve personas que sufrió la gripe H1N1 en 2009, algunos de los cuales en su momento sólo sufrieron leves molestias, mientras que otros fueron incluso hospitalizados. Se les tomaron muestras de sangre para poder analizar los glóbulos blancos que producen anticuerpos efectivos contra la gripe.

Después de eso el equipo se encargó de aislar los genes responsables de la producción de estos anticuerpos, para poder crearlos en laboratorio y ver cómo respondían ante distintos tipos de cepas. De todos los anticuerpos producidos, algunos de ellos fueron capaces de lidiar con unas de las infecciones más peligrosas relacionadas con esta familia de virus, como la gripe española de 1918, una epidemia durante la cual murieron unas 50 millones de personas (casi el 5% de la población mundial). Además resultaron efectivos contra otro virus que representa una gran amenaza: la gripe aviar o H5N1.

Estos anticuerpos nos podrían llevar a crear una vacuna efectiva contra distintos tipos de influenza, nueva y vieja. En contraparte, las vacunas actuales sólo son útiles contra cepas del virus concretas.

Aún así ¿qué puede detener las futuras influenzas de poder superar esta vacuna? La verdad no mucho, pero estos antibióticos han demostrado ser extremadamente útiles porque atacan a una parte específica del virus, el "tallo", formado por una proteína específica llamada hemaglutinina. Esta parte del virus es común en todos los tipos de la influenza y casi no cambia, por lo cual los científicos creen que podrían conseguir una vacuna contra la mayoría de las gripas y (con suerte) quizás todas.

¿Estaremos a punto de acabar con la gripe? ¿Dejará de formar parte de las enfermedades sin cura? ¿Es el fin de los remedios caseros para mitigar los síntomas de la gripe? ¿Será otro triunfo de la biología y la medicina? Esperemos que sí.