Sentenciada por un tweet

La noticia viene de China, donde ya es claro que la libertad de expresión que brindan redes como Twitter, puede ser muy perjudicial frente a un gobierno que tiene cualquier cosa menos sentido del humor. Cheng Jianping (@wangyi09 fue acusada de perturbar el orden público, y sentenciada a "re-educación a través de trabajos forzados" por haber retweeteado un mensaje que decía:

Manifestaciones anti japonesas, destruir productos japoneses, eso ya lo hizo hace años Guo Quan [un activista y experto en la masacre de Nanjing]. No es un truco nuevo. Si realmente quisieras llevarlo más lejos, volarías de inmediato a Shanghai a destrozar el pabellón de Japón en la Expo.

El tweet original de su prometido, Hua Chunhui (@wxhch, era una burla a las protestas entre barcos pesqueros de China y Japón y hacía referenica a la Expo Shnaghai, pero ella agregó a su RT un irónico "¡A la carga, juventud iracunda!". El gobierno no lo encontró nada gracioso y empezó la persecución, 10 días después Cheng desapareció en el que iba a ser el día de su boda, semanas luego se supo que había sido detenida y el lunes pasado fue sentenciada por la policía local a pasarse un año en un campo de trabajos forzados.

Amnesty International está en plena campaña para la liberación de Jianping, considerando, lógicamente que esta sentencia sin juicio "por simplemente repetir una observación claramente satírica de otra persona en Twitter demuestra el nivel de la represión de la expresión online en China*". Sam Zarifi el director de la irganización para Asia y el Pacífico también dice que seguramente Jianping había estado en la mira del gobierno por haber participado antes en activismo online ligero, y que este retweet terminó por marcarla como una "amenaza" al orden público, se desconoce si a su prometido, el del tweet original, o si alguno de los otros que lo retweetearon han sido detenido por la policía.

Twitter está bloqueado en China, pero de todas formas muchos activistas lo usan para expresarse, tal vez con el caso de Jianping quieran sentar algún tipo de ejemplo ser un ejemplo de que la libre expresión, incluso la que es irónica o satírica y que no está realmente incitando a la violencia o a perturbar ese "orden" público que dicen tener, no está permitida ya bajo ningún concepto por ese régimen autoritario, que no tiene problema en aplicar castigos de este tipo, sin siquiera un juicio, que pueden privar a una persona de su libertad por hasta 4 años.

Parece irreal que siga existiendo este tipo de censura extrema en el mundo, pero lamentablemente si bien este es el primer caso en el que algo tan pequeño como un retweet puede resultar en privación de la libertad, no creo que estemos ante el último. Voy a leer con más cariño los tweets ácidos y sarcásticos que a veces inundan mi timeline, agradeciendo la libertad de expresión que tantas veces doy por sentada, pero de la que tristemente no todos los seres humanos gozan.

Vía: The Next Web

32 respuestas a “Sentenciada a un año de trabajos forzados por un retweet”