El enfoque en la mayoría de las fotografías es crucial, determinante, el punto de inflexión entre el bien y el mal. Digo en la mayoría y no en todas porque a veces buscamos desenfocar la escena con fines artísticos.

Todos sabemos que para conseguir un buen enfoque podemos hacerlo manualmente, a la vieja usanza, o fiarnos del autofocus de nuestra cámara. En el último caso tendremos que tener en cuenta, por norma general, que cuanto más dinero nos hayamos dejado en nuestra cámara y en nuestro objetivo más veces clavaremos el enfoque. otra cosa es que elijamos bien qué punto enfocar.

Sabemos, igualmente, que necesitamos luz para poder usar velocidades que aseguren el enfoque (en condiciones de insuficiente luz algunas cámaras no solo no enfocaran bien sino que ni siquiera llegaran a enfocar). El estabilizador que portan algunos objetivos y cuerpos nos harán ganar varios pasos, más en el caso del estabilizador del objetivo que en el del cuerpo.

En condiciones normales nos bastará con usar una apertura grande, subir el ISO, bajar la velocidad....pero cuando lo anterior no surte efecto recurrimos al trípode, cosa que está muy bien. El problema llega cuando ni siquiera usar el trípode es suficiente y creedme que a veces pasa. ¿Cuándo? Cuando usamos teleobjetivos y mucho más si encima hay poca luz. ¿Qué podemos hacer? vamos a verlo...

* Sujeta la cámara al trípode desde el anillo del teleobjetivo mejor que desde el cuerpo.

* Cuidado con las patas del trípode. No lo abras a lo loco, extiéndelo lo justo y necesario, sin pasarte y extiende primero las secciones más gruesas. Si no lo hacemos así conseguiremos desestabilizar el trípode y hacerlo más vulnerable al viento.

* Engancha la mochila del equipo al trípode para que gane en estabilidad.

* Usa un pequeño saco o bolsa lleno de piedras pequeñas, arroz, judías...(lo que se te ocurra) y ponlo sobre el objetivo y la cámara para que absorba los movimientos del obturador.

* Bloquea el espejo. Es una gran utilidad de la mayoría de nuestras cámaras y te permite evitar los efectos secundarios de la trepidación producida por el espejo.

* Usa un disparador remoto o en su defecto el temporizador de la cámara.

* Deja que pasen unos segundos entre cada disparo para que la cámara se estabilice.

Si sigues estos pequeños pasos será difícil que en tu próxima salida al bosque en busca de esos animales tan tímidos vuelvas con fotografías fuera de foco. Espero os sirva de algo.

Foto: Mugley

Más guías y consejos

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito