Pocas personas en el mundo tienen una visión tan fuera de concepto del diseño que los japoneses, que siempre sorprenden y generalmente sorprenden bien.
Este teléfono es una de las últimas creaciones de la empresa KDDI, de esos modelos de móviles que tan sólo veremos en fotografías y muy difícilmente veremos que nuestra operadora nos lo regale con dos años de contrato.
A mi en lo particular me agrada el estilo de rayos equis, logrado con una carcaza de un tono semitransparente que permite ver toda la bola de circuitos que componen tan singular pieza de consumo.
El KDDI X-Ray hasta eso no es un teléfono cualquiera, siendo un producto para el mercado nipon no podría tener características técnicas tímidas.
El X-Ray viene dotado de un corazón Qualcomm SnapDragon a 1 GHz, una pantalla de 3 pulgadas al interior de un diseño de almeja, su teclado es alfanumérico y no me pregunten del sistema operativo porque francamente no doy con cuál sea.
Soporta la señal de televisión, que es un estandar el 1Seg allá en el lejano oriente, y también tiene el sistema de pagos NFC, por ello de que a algunas personas les cause pereza sacar el cartón de crédito para pagar.
Al frente tiene un coqueto display con leds muy techno, un detalle que realza el concepto de diseño con el que se apropia el X-Ray.