Con el cambio de diseño del iPhone 4, la curvatura trasera a la que tan acostumbrados estábamos, después de tanto uso con los dos modelos inmediatamente anteriores, desapareció.
Este hecho, supongo que no seré al único que le pasa, me dejó -inicialmente- un poco desubicado, ya que con el 3GS había conseguido aprender a agarrarlo de una forma determinada que me permitía escribir sin apenas mirar al teclado (con un porcentaje de acierto considerable, claro está).
Así que, ahora, con el nuevo modelo, muchos de nosotros volvemos a enfrentarnos al mismo problema que cuando empezamos a usar teléfonos con pantalla táctil sin teclados físicos: mientras escribes tienes que estar por la pantalla, por lo que ya te puedes olvidar de hacer más de una cosa a la vez -siempre que requiera de una mínima atención-.
Para "intentar" solventar estos problemas tan comunes hoy en día -y más con la proliferación de estos diseños táctiles o multitáctiles- se ha presentado en la IFA el Nuu Mini Key, una abultada funda que incorpora un teclado físico que se enlaza por bluetooth al iPhone 4 y que, según nos cuentan los editores de Engadget, no parece demasiado cómodo (las teclas, en la versión retroiluminada, van demasiado duras y cuesta bastante presionarlas para obtener respuesta del terminal al que está conectado).
Por si fuese poco, esta anti-estética funda, saldrá al mercado a finales de año por 60€
Yo, personalmente, pagar por un diseño y unas funcionalidades tan paupérrimas esa cantidad no me parece muy inteligente (puede llegar a ser útil pero no creo que compense), así que empezaré a practicar la escritura con mi iPhone 4.
¿Y vosotros, os compraríais semejante armatoste?