O libros digitales versus libros impresos, enésimo round. A estas alturas es prácticamente es un cliché decir que el libro impreso está muerto, que sólo tiene un par de años de vida, pero lo siguen haciendo, aún personas como Nicholas Negroponte. Recientemente, esta profecía pareció haber sido demostrada por el hecho de que Amazon está vendiendo más e-books que libros de tapa dura, como les contamos hace unos meses.

Y claro que no es un dato menor, ¿pero es para tanto? A ver, Amazon dijo estar vendiendo 180 e-books por cada 100 libros en tapa dura. Sólo el 23% de los libros vendidos son de tapa dura y Amazon cuenta con un 19% del mercado, vendiendo en la primera mitad del año aproximadamente unos 15.6 millones de libros de tapa dura. Por lo tanto, habría vendido unos 22 millones de libros electrónicos, en lo que representa sólamente el 6% del mercado.

Aún utilizando los mismos datos de Amazon, podríamos decir que están vendiendo 334 libros de tapa blanda por cada 100 hardcover o 434 libros impresos por cada 180 e-books, quienes pasarían a representar sólamente el 29.3% de las ventas de Amazon. Teniendo en cuenta el resto del mercado, en el que apenas se venden libros electrónicos, el número baja a sólamente el 6%.

Además, estamos viviendo un enorme hype (sobre todo en Estados Unidos) que seguramente no dure mucho. Recientemente, una escuela de Florida reemplazó todos los libros de texto de sus estudiantes por dispositivos Kindle, a pesar de que excelentes universidades como Princeton ya lo probaron, con efectos efectos bastante negativos, considerando el cambio poco recomendable.

Claro que las ventas de libros electrónicos continuarán aumentando, pero hay que detener esta manía de pretender que cualquier nueva tecnología debe terminar con otra. Y también hay que tener en cuenta que la industria del libro es muy distinta a la cinematográfica o a la discográfica, no hay un equivalente a la conversión de CDs a MP3s o el ripeo de un DVD a un XVID, es un formato diferente.

Como sucedió en el caso de "la muerte de la web", parece haber un gran negocio detrás de la pretendida muerte de una tecnología, en este caso es Amazon vendiéndonos los libros digitales como la panacea, el fin de los anticuados y molestos libros impresos. Quizás muera algún día el libro, pero esto dependerá de muchos factores, no sólo de los antojos de una empresa (por más grande que sea) y no creo que pase en cinco años. Si el CD todavía está vivo (con sentencia de muerte a ser cumplida en cualquier momento, pero mientras tanto algunos CDs se siguen vendiendo), el libro tiene todavía mucho camino por delante.

Vía: Technology Review

29 respuestas a “El libro impreso está vivo y coleando”